El jugador del Barça, Pierre-Emerick Aubameyang, ha sufrido una agresión esta madrugada en su domicilio de Castelldefels en Barcelona cuando unos ladrones han irrumpido para robarle. Los encapuchados le habrían amenazado con armas blancas y a punta de pistola para luego golpearle. Según fuentes policiales, le intimidaron hasta que les dio acceso a la caja fuerte, donde se hicieron con diversas joyas. Según las premisas, los asaltantes habrían accedido por el jardín para luego, tras el robo, huir en un Audi A3 blanco.
Tal y como recoge El País, la mujer del jugador fue quien dio el aviso a los Mossos, que ya investigan quiénes han podido ser los atacantes. Según informó RAC1, los ladrones tuvieron retenidos al jugador y a su mujer en el suelo durante al menos una hora y le propinaron un golpe a Aubemayang en el mentón. Ambos se encuentran bien.
Esta no es la primera vez que han robado en casas de futbolistas de alta categoría: Gerard Piqué, Lucas Vázquez, Nelson Semedo o Jordi Alba también han sufrido hurtos en sus domicilios. El caso de Aubameyang es el más grave puesto que ha sido un allanamiento con fuerza. Hace dos semanas el recién incorporado al equipo culé, Robert Lewandowski, también sufrió un robo, cuando le sustrajeron el reloj de lujo que portaba. Antes de entrar en el recinto de la ciudad deportiva del FC Barcelona para entrenarse, el jugador polaco bajó la ventanilla de su coche para firmar unos autógrafos a los aficionados, momento en el que un hombre le arrebató el reloj de lujo que llevaba en la muñeca. El 18 de agosto, los Mossos d'Esquadra con la ayuda de la Policía Local de Sant Joan Despí (Barcelona) detuvieron al presunto autor de este robo.
Investigación abierta
Los Mossos d'Esquadra han abierto una investigación para tratar de identificar, localizar y detener a los autores de este robo violento. Por su parte, el FC Barcelona ha prestado asistencia y apoyo al futbolista, que se encuentra bien, y a su familia, según fuentes cercanas al caso.
En casa de Aubameyang también estaba un compatriota suyo de 21 años, Babanzila Meshak, que vive en el domicilio, y que, igualmente, ha sufrido el asalto, por lo que hacia las seis de la mañana su representante ha llamado al club de fútbol de Terrassa en el que juega para avisar que no iría a entrenar porque estaba asustado por lo ocurrido, según ha explicado a Rac-1 su director deportivo, Miquel Ezequiel.
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