El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha frenado en seco cualquier tentación del PSOE de participar en las manifestaciones feministas del 8-M con la pandemia del coronavirus lejos de estar controlada. La Moncloa ha intervenido después de que el delegado del Gobierno en Madrid anunciara que se autorizarían concentraciones de 500 personas en el Día de la Mujer.
Fuentes socialistas explican a Vozpópuli que Sánchez no quiere, por un lado, que la presencia del socialismo en las calles este 8-M lo utilice el PP, y en especial Isabel Díaz Ayuso, contra el Gobierno como un bumerán. Y, por otro, tampoco quiere que se escenifique el "conflicto de contenido y de forma" que enfrenta ahora a los movimientos feministas del PSOE y su socio de coalición Unidas Podemos.
"Se nos cae el discurso contra Ayuso"
La Moncloa ha descartado rápidamente su participación en las marchas. La ministra de Sanidad, Carolina Darias, fue nítida en su comparecencia del miércoles. "No ha lugar". Un mensaje, dicen estas fuentes, teledirigido desde Presidencia. La intervención del delegado del Gobierno en Madrid, José Manuel Franco, había sembrado dudas en el seno del partido sobre la participación del PSOE en las marchas restringidas de este año.
"Al PSOE le crea un problema, especialmente en Madrid, porque se nos viene abajo el discurso de oposición a las alegrías que se permite Díaz Ayuso en plena pandemia", explican estas fuentes. "Lo más importante es ser prudentes".
El PSOE, tras los avisos de Moncloa, ha atajado el debate por la vía rápida. Y ha anunciado que el partido apoyará actividades el 8-M "que sean compatibles con la situación sanitaria". "Hay muchas formas de de plantear la jornada y no es obligatorio estar en la calle", aseguran estas fuentes. "Por mucho control que haya, 500 personas ya es un número elevado y pueden producirse brotes".
Otro de los problemas que afronta el PSOE en este Día de la Mujer es la fractura con su socio de coalición Unidas Podemos en políticas de igualdad. La llamada ley del sí es sí -el consentimiento sexual- está paralizada más de un año después de que la ministra de Igualdad, Irene Montero, la llevara al Consejo de Ministros. Y el borrador de la ley de los transexuales también ha dividido a las dos formaciones.
Podemos saldrá este 8-M
Podemos ha sido menos contundente que el PSOE sobre su presencia en las calles. Igualdad ha dicho que seguirá las recomendaciones de Sanidad. Pero el portavoz morado en el Congreso, Pablo Echenique, ha dicho que estarán en la calle. Y en la misma línea se ha expresado en las redes la secretaria de Estado de la Agenda 2030, Ione Belarra. La dirigente de Podemos ha hecho este llamamiento tras conocerse el rechazo unánime del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) al proyecto del sí es sí.
Algunas de las principales dirigentes del PSOE han aprovechado las redes sociales para pedir a la gente que se quede en casa este 8-M. Sánchez tiene muy presente la cita del año pasado. El Gobierno alentó la participación masiva de las mujeres en las manifestaciones del 8-M cuando el coronavirus ya amenazaba el país. El presidente del Gobierno declaró el estado de alarma y ordenó el confinamiento general de la población menos de una semana después de aquellas concentraciones.
Las distintas Delegaciones del Gobierno serán las encargadas de autorizar y velar por la seguridad de este 8-M. La justicia archivó una causa abierta contra José Manuel Franco por permitir la protesta del año pasado. La juez no encontró indicios suficientes de prevaricación administrativa, pero consideró "sorprendente" que el Ministerio de Sanidad no alertase al delegado en Madrid de los riesgos sanitarios.
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