España

Suboficiales que estudian para policías locales: "Cobramos menos y no tenemos estabilidad"

La búsqueda de mejores condiciones laborales ha empujado a cuatro sargentos de las Fuerzas Armadas a prepararse las oposiciones a los cuerpos municipales o a plantearse dicho salto

Manuel acumula más de 10 años de servicio en las Fuerzas Armadas. Es suboficial, está casado y tiene un hijo. Pero con sólo 32 años quiere dejar de lado la carrera militar para ingresar en la policía local de su ciudad. "Estoy preparándome las oposiciones", cuenta. Vozpópuli recoge el testimonio de otros tres sargentos que se están preparando las oposiciones a policía municipal o bien se están planteando este cambio. Casi todos ellos persiguen lo mismo: una mayor conciliación familiar y salarios más acordes a sus funciones.

Las asociaciones profesionales de militares llevan años reclamando una mejora en sus nóminas. El año pasado, el Gobierno aplicó la primera subida salarial desde 2005, sin contar las realizadas por el IPC. Sobre el papel supuso un aumento de entre 40 y 113 euros, muy lejos de lo demandado por estos colectivos, que exigen un plan plurianual como el acometido para la Guardia Civil y la Policía Nacional. La famosa equiparación salarial de los dos cuerpos uniformados, explican desde ASFASPRO, la asociación que representa a los suboficiales de las FAS, ha disparado las consultas de sargentos para opositar a estos dos cuerpos uniformados.

La opción de dar el salto a la Policía Nacional y a la Guardia Civil está prevista en la Ley de Tropa y Marinería de 2006, que reserva una serie de plazas para los militares. Existen, además, convenios con ayuntamientos para quienes quieren opositar a policía municipal. Para los suboficiales, regidos por la Ley de la Carrera Militar de 2007, no se reservan plazas en estos cuerpos. Tampoco su propia condición de sargento en las Fuerzas Armadas 'puntúa' como mérito para acceder a ellos, explica ASFASPRO.

El colectivo asegura que los suboficiales que renuncian a sus galones para marcharse a otros cuerpos lo hacen por el salario y para evitar la movilidad. En esta escala, añade, un ascenso interno puede suponer un cambio de destino. Dentro de las Fuerzas Armadas, los suboficiales no son los peores pagados. Si un soldado marinero gana cerca de 1.100 euros al mes, el sueldo de un sargento primero ronda los 1.600 euros. Durante sus años de formación cobran 359,55 euros, según la información oficial que ofrece el Ministerio de Defensa.

El 'sueño' de ser policía local

Desde ASFASPRO aseguran que conocen varios suboficiales que han terminado en la Policía Nacional, la Guardia Civil o en cuerpos municipales. Los testimonios de los cuatro sargentos recabados por este diario confirman el interés entre las Fuerzas Armadas en los cuerpos municipales. A ninguno de los suboficiales consultados se le cita en este artículo con su nombre real. "Mi caso es parecido al de muchos compañeros. Algunos ya se han ido a la Guardia Civil o a la Policía Nacional y otros están preparándose", dice Manuel. Cree que Defensa no premia la "responsabilidad" que ejercen los suboficiales y critica la "inexistente conciliación familiar". "No hace mucha gracia con 40 o 50 años tener que irte de casa porque has sido destinado de forma forzosa fuera de tu ciudad al perder la vacante en los ascensos", insiste.

No hace mucha gracia con 40 o 50 años tener que irte de casa porque has sido destinado de forma forzosa fuera de tu ciudad al perder la vacante en los ascensos"Un suboficial que se prepara las oposiciones para ingresar en la policía local de su ciudad

Samuel tampoco quiere cambiar de residencia "cada vez que consiga un ascenso o se produzca la disolución o traslado de una unidad". En estos momentos, este suboficial se está preparando para la próxima convocatoria de plazas del cuerpo municipal de policía de una importante ciudad andaluza, la misma en la que vive su familia, su mujer e hijos. El militar, que está destinado en una provincia limítrofe, lleva cinco años trasladándose los fines de semana a la ciudad de su familia con el "consiguiente desgaste personal y familiar, sumando en la actualidad los altos precios del combustible".

"Por todo ello, y el desgaste habitual y normal que provoca los casi 13 años de servicio, en los que pocas cosas han mejorado en el ámbito laboral, veo la oportunidad de obtener una plaza que no conlleve estas desventajas, como totalmente apetecible, a pesar de suponer una 'pérdida' de antigüedad, empleo, etcétera", explica.

Alejandro, por ahora, no se está preparando ninguna oposición. Pero sí se lo plantea. Ingresó a la escala de suboficiales de la Armada en 2016 con su nota de bachillerato y pasó dos de sus tres años de academia en una fragata. En ese tiempo, cobró los en torno a 300 y pico euros que reciben los suboficiales en formación. Y ahora, detalla, se encuentra "cobrando menos que un policía local que ha hecho un curso de seis meses de duración" y "pese a ser un funcionario de mayor categoría que el policía". ATME, la Asociación de Tropa y Marinería Española, ha hecho hincapié en varias ocasiones en la diferencia salarial que existe entre los miembros de las Fuerzas Armadas y los agentes municipales, que suelen cobrar 1.600 mensuales e, incluso, "entre 2.000 y 2.500 euros" en algunas localidades. Pero el salario no lo es todo para Alejandro. Lamenta que no tiene "ninguna estabilidad" ni "conciliación familiar" porque se pasa casi seis meses del año fuera de casa por la alta operatividad de su fragata.

"Tengo 35 años y soy sargento del Ejército de Tierra por acceso de promoción interna con cuatro años de antigüedad y ya me preocupa que en cuatro años ascienda y me toque volver a mover toda la vida y familia a otra parte de España", lamenta otro suboficial interesado en renunciar a sus galones y marcharse a otro cuerpo uniformado. Esgrime los mismos argumentos que sus compañeros: "Poca conciliación familiar", "poca oferta de movilidad", los "cambios de destino obligatorios" y el salario.

Subida del gasto militar al 2% del PIB

El lamento de estos cuatro suboficiales coincide con el cisma en el seno del Gobierno de coalición sobre el aumento del gasto militar. La semana pasada, el Gobierno aprobó un suplemento de crédito de hasta 1.000 millones de euros para el Ministerio de Defensa para iniciar la subida del gasto militar. El objetivo es que esta partida alcance el 2% del Producto Interior Bruto (PIB) en 2029. Según El País, en el borrador del informe de la Comisión Técnica sobre Retribuciones del Personal de las Fuerzas Armadas se reconoce que es necesario una revisión general de los salarios de los 120.000 militares en activo y una adecuación de sus retribuciones a sus condiciones de "responsabilidad, preparación técnica, peligrosidad y penosidad". Sin embargo, asociaciones militares han afeado a Defensa que el citado borrador no concreta lo suficiente la cuantía de las mejoras retributivas.

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