En España se producen una media de diez suicidios al día. Cada dos horas y media una persona se quita la vida. La cifra no es nueva. Viene repitiéndose desde hace, al menos, una década. Pero los psicólogos se muestran preocupados ante el aumento de las conductas suicidas entre los jóvenes. Aunque advierten que esta lacra depende de muchos factores, los expertos consideran un agravante para los adolescentes con problemas el bombardeo de vidas idílicas y el 'postureo' que reina en redes sociales como Instagram.
"Reducir los motivos que llevan a una persona a quitarse la vida a una sola causa es un error. El origen de los suicidios es multifactorial y multidimensional. Partiendo de esa base, y en el caso de los jóvenes, podría decirse que las redes sociales pueden influir negativamente en determinadas situaciones", explica el psicólogo Luis Fernando López a Vozpópuli.
"Durante el periodo de maduración se forma la identidad de una persona, así como sus apegos y relaciones. Las redes promocionan la creación de una imagen ideal, es decir, cómo les gustaría ser, advierte el también codirector del proyecto ISNISS y director técnico del programa 'Hablemos de... Suicidio'. Un programa puesto en marcha por el Colegio Oficial de la Psicología de Madrid que persigue sensibilizar a los ciudadanos y acabar con "los tabúes" en torno al suicidio. "A veces la identidad virtual no se corresponde con la real y se produce una disociación psicológica", reconoce.
Pueden llegar a preferir la identidad que han construido en sus perfiles a la suya propia
"Esto, sumado a otros problemas de ansiedad, depresión, trastornos alimenticios... No ayuda. Pueden llegar a preferir la identidad que han construido en sus perfiles a la suya propia", apunta.
Por otro lado, señala, se comunican cada vez más a través de un lenguaje simbólico, por emoticonos, pero no saben identificar sus emociones ni comunicarlas en la vida real. "Muchas familias acuden a consulta con este problema", comenta.
Cuando una persona no encuentra su identidad -insiste López- se producen estados alterados que, sumados a problemas de conducta y patologías suponen "un caldo de cultivo para las conductas que lleven al suicidio".
"La incertidumbre y la frustración derivadas de la pandemia también han contribuido a ese caldo de cultivo", apostilla. E insiste en las múltiples causas que pueden llevar a un joven y a un adulto a suicidarse.
Hasta 3.671 suicidios en 2019
Según los datos oficiales aportados por el Instituto Nacional de Estadística (INE), en el año 2019 se registraron 3.671 suicidios: 2.771 hombres y 900 mujeres. La cifra supone un incremento del 3,7% con respecto al año anterior. Las mujeres suelen pensar más en quitarse la vida y triplican los intentos respecto a los hombres.
El mayor número de fallecimientos se produce en la franja de edad de los 30 a los 39 años, seguida por la franja de 50 a 54 años y, después, por la que abarca de los 45 a los 49 años.
Es la principal causa de muerte no natural en población adulta y, recientemente, también se ha convertido en la principal causa de fallecimiento entre los jóvenes de edades comprendidas entre los 15 y los 29 años. En 2019, hubo 307 suicidios en este grupo etario.
Los suicidios se ha convertido en la principal causa de fallecimiento entre los jóvenes entre los 15 y los 29 años
"Las causas y variables de la conducta suicida son numerosas y complejas en contante interacción relacionadas con el bagaje vital de la persona, de su propia psicología y con un componente biológico que está trasversalmente influido por las nuevas tecnologías de información y comunicación, que ejerce una influencia positiva o negativa en función de la educación emocional y el entorno", explican desde el colegio.
"La pobreza, el desempleo, los duelos, los problemas sociales, el abuso de sustancias tóxicas, el maltrato en la infancia, la violencia machista, el aislamiento social y determinados trastornos en salud mental, como la depresión, tienen una gran influencia en esa tasa de suicidios que hoy tratamos de visibilizar y prevenir", añade el equipo detrás de la iniciativa 'Hablemos de... Suicidio' que dirige López.
Perfiles de amigos y famosos
Desde la plataforma Soloparamadres.com también han querido abordar la problemática en torno a los adolescentes.
"Las familias se encuentran en ocasiones solas o impotentes ante la situación, ya que los factores que pueden desencadenar hacia la actitud suicida de una persona son dependientes de múltiples variables. Entre los jóvenes, principalmente adolescentes, puede derivar de la etapa de crecimiento personal hacia su yo adulto, en la cual pueden sentirse perdidos", constatan.
Pero en la sociedad actual, apuntan, en la que dependemos de las redes sociales, es realmente preocupante la influencia que tienen estas sobre las vidas de los jóvenes.
"El constante bombardeo de vidas idílicas que puede verse a través de perfiles de personas famosas o incluso de sus amigos, crean falsas expectativas de vida que pueden llegar a suponer una meta inalcanzable, finalizando en frustración y desesperación", explican.
Y concluyen: el bullying, tanto físico como a través de internet, conocido también como ciberbullying, es otra cuestión que se debe atajar por parte de la sociedad".
Los psicólogos del Colegio Oficial de Madrid insisten en que "la prevención de los suicidios es una responsabilidad de todos. Podemos y debemos visibilizar el problema y colaborar en su prevención", lanzan..
Apoya TU periodismo independiente y crítico
Ayúdanos a contribuir a la Defensa del Estado de Derecho Haz tu aportación