El Tribunal Supremo continuará con su criterio de revisar las condenas por agresión sexual de manera individualizada, pese a la instrucción dada por la Fiscalía General del Estado en relación con este asunto. La Sala de lo Penal analizará caso por caso los recursos que tiene sobre la mesa en condenas por violaciones y mantendrá esta forma de actuar al margen de la orden dada desde la cúpula del Ministerio Fiscal de no rebajar algunas condenas.
Fuentes jurídicas confirman a Vozpópuli que el alto tribunal entiende que no puede hacerse una aplicación genérica de la conocida como ley del 'solo sí es sí' y que lo que cabe en estos casos es estudiar los recursos pendientes de deliberación de manera individualizada. Al respecto, ya se informó acerca de que la Sala Segunda del Tribunal Supremo resolvería sobre las primeras condenas en cuestión de semanas y que sería especialmente complicado unificar criterio en relación a este asunto, pese a lo pretendido por el Ejecutivo.
Los magistrados tienen poco margen de actuación en la revisión de las condenas a tenor del efecto provocado por la ley impulsada por Irene Montero. Los primeros fallos revisados al respecto tanto en las audiencias provinciales como en tribunales superiores de Justicia se pronuncian, en líneas generales, con una rebaja genérica de las condenas. Los jueces plasmaron por escrito la necesidad de modificar las penas impuestas en aplicación directa de la reforma legal impulsada.
La solución de la Fiscalía no es mala, pero llega tarde. Si se hubiera hecho antes de la entrada en vigor de la Ley, no se interpretaría que se sale a rescatar al Ministerio de IgualdadFuentes fiscales
Ante la disparidad de criterios adoptados por la Fiscalía -que en algunos casos informaron a favor de las rebajas y en otros en contra- el jefe de la institución, Álvaro García, acaba de ordenar vía decreto unas pautas a seguir en este asunto. A falta de que se revise por la Junta de Fiscales de Sala, se da la instrucción de no revisar a la baja aquellas condenas que estén vigentes en la nueva ley. Ello quiere decir que, en los casos en los que la pena impuesta se incluya dentro de la horquilla legal actual, no se modificará.
Ahora bien, el fiscal general da por hecho que ese escenario no es el único que se va a producir. Así pues, se tendrán que revisar a la baja aquellas sentencias en las que la pena establecida exceda a la que se le debería imponer con la ley del 'solo sí es sí'. Esa situación es precisamente la que se ha impuesto en las primeras revisiones de sentencias firmes. En muchos casos los magistrados se han visto obligados a reducir la condena en varios años a agresores sexuales tras la entrada en vigor de la Ley orgánica 10/2022.
"El criterio fiscal llega tarde"
La misma rebaja la pena mínima de seis a cuatro años en casos de violación con acceso carnal, lo que se ha traducido en una reducción de condenas y, en ocasiones, hasta en la orden de excarcelación del reo. A partir de ahora, la Fiscalía tratará de frenar la sangría de rebajas, advirtiendo de que no caben "automatismos". Se pretende, de esta forma, que las penas mínimas impuestas no sufran modificación.
Fuentes fiscales consultadas por este medio no cuestionan el contenido de la circular, pero denuncian que ha tardado mucho tiempo en salir. Algunos representantes del Ministerio Público consideran que la actuación de Álvaro García se ha entendido en clave política como un respaldo al Gobierno. "La solución que se adopta no es mala. No es un criterio extraño ni novedoso. Lo que no se entiende es que haya salido tan tarde porque si se hubiera hecho antes de la entrada en vigor de la Ley nadie hubiera dicho que se sale al rescate del Ministerio de Igualdad", rezan las voces consultadas.
Las mismas explican que la cúpula del ente tendría que haber fijado los criterios (aunque todavía no haya circular) antes de que la conocida como ley del 'solo sí es sí' entrara en vigor el pasado 7 de octubre. "Hay que intentar evitar al máximo que se produzcan situaciones de posible disfunción porque las resoluciones que se adoptan no son las que convienen al Gobierno, sino las que dicta la Fiscalía General del Estado", indican.
Fiscalía de menores
De hecho, desde la Fiscalía de Menores ya se tomó cartas del asunto a principios de septiembre. En una nota interior firmada por el fiscal de Sala, Eduardo Esteban, se dio orden ya de no aplicar de manera automática los efectos de la ley del 'solo sí es sí' para evitar que los castigos a menores fueran más altos que en el caso de los adultos. El documento, al que ha tenido acceso este medio, trataba de evitar agravios comparativos en la aplicación de las rebajas en el caso de los menores de edad.
La nota se emitió a tenor de una consulta formulada por las Secciones de Menores de las Fiscalías Provinciales de Sevilla, Alicante y Madrid. Ya entonces, se pidió un criterio unificador para evitar que se produjeran casos dispares en la aplicación de las rebajas de condenas. Sin embargo, la cúpula de la Fiscalía se ha pronunciado en plena polémica por la aplicación de la ley impulsada por el Gobierno. La misma ha provocado el enésimo choque con el Poder Judicial ante las críticas de machismo y prevaricación vertidas desde Podemos a los jueces que han aplicado los efectos de la norma.
NormaDin
Lo que intenta explicar la Rosell en Twitter no se entiende ni con fórceps. Le ha salido un anacoluto más podemita que jurídico. Cabe preguntarse cómo pudieron ser tan necios como para suponer que la rebajita de las penas en la ley no se iba a trasladar a la revisión de las sentencias. La única respuesta que se me ocurre es la confianza que tuvieran los comunistas podemitas en su capacidad de influir sobre los jueces mediante la admonición de machismo extremiderechista. La circular dirigida a los fiscales es un recurso propagandístico. La jurisprudencia es más que previsible.
Pontevedresa
Todo un Tribunal Supremo repitiendo el trabajo que han hecho ya los jueces, y todo para que la intocable Montero siga haciendo lo que le salga del moño porque ella lo vale, vale tanto como la poltrona de Sánchez que no quiere que nadie la toque y le diga el disparate que ha hechol. ¡Que trabajo el Supremo¡