El Tribunal Supremo ha constatado el ingreso, en la cuenta bancaria de este órgano, de las fianzas de 25.000 euros que impuso el magistrado Pablo Llarena a los exmiembros de la Mesa del Parlamento de Cataluña Anna Simó, Lluís Guinó, Ramona Barrufet y Lluís Corominas si querían eludir su ingreso en prisión, han informado este jueves fuentes jurídicas.
Todos ellos, a los que se imputan indiciariamente delitos de rebelión, sedición y malversación de fondos públicos, deberán comparecer semanalmente en el Juzgado, se les ha retirado el pasaporte y tienen prohibido salir del territorio nacional.
El instructor del alto tribunal les impuso una fianza de 25.000 euros a cada uno de ellos jueves de la semana pasada, tras tomarles declaración, y les dio una semana para hacerla efectiva. El pago fue anunciado ayer miércoles por la Asamblea Nacional Catalana y el tribunal ya ha constatado el ingreso, por lo que se da formalidad al auto de libertad que Llarena dictó tras tomarles declaración.
Según la ANC, que es la que ha consignado las fianzas, el pago se hecho con los fondos de su 'caja de solidaridad', creada para hacer frente a los procesos judiciales abiertos contra cargos soberanistas y nutrida a partir de donaciones de los ciudadanos.
Del resto de exmiembros de la Mesa investigados por el Supremo, Joan Josep Nuet fue puesto en libertad sin medidas cautelares, mientras que a la presidenta del Parlament, Carme Forcadell, se le impuso una fianza de 150.000 euros que también abonó ANC en la mañana del día siguiente a su ingreso en prisión. Así, entre el pago de Forcadell y el de los otros cuatro miembros de la Mesa, la entidad soberanista ha abonado 250.000 euros en menos de una semana.
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