La lucha interna en el seno del PSOE andaluz vuelve a cobrar fuerza tras las recientes declaraciones de Susana Díaz, exsecretaria general del partido y expresidenta de la Junta de Andalucía. En una entrevista, Díaz ha señalado a José Luis Ábalos, entonces secretario de Organización del PSOE, como pieza clave en su derrota en las primarias de 2021, que dieron la victoria a Juan Espadas, actual secretario general del partido en Andalucía. Según Díaz, Ábalos pasó "15 días en un hotel" movilizando apoyos para asegurar la derrota de la exlíder socialista.
Estas palabras han reavivado el debate sobre lo ocurrido en aquellas primarias, en las que, además de Díaz y Espadas, también se presentó el profesor Luis Ángel Hierro, aunque sin éxito. El resultado de aquellas elecciones internas derivó no solo en la elección de Juan Espadas como candidato del PSOE a la presidencia de la Junta de Andalucía, sino también en su posterior designación como secretario general del PSOE andaluz, desbancando a Díaz del liderazgo del partido en la comunidad.
Desde el actual liderazgo socialista en Andalucía, las declaraciones de Díaz han sido recibidas con desdén. María Márquez, portavoz del PSOE-A, respondió contundentemente este miércoles durante una rueda de prensa en el Parlamento andaluz, asegurando que fueron los militantes quienes decidieron libremente el resultado de las primarias. Márquez recalcó que el proceso de votación fue transparente y que no hubo injerencias externas en la decisión final. "Los militantes fueron quienes decidieron quién querían que fuera el secretario general", afirmó la portavoz, restando importancia a las acusaciones de Susana Díaz.
Márquez también quiso destacar que en el PSOE la militancia es el verdadero motor del partido, al señalar que "si hay algo que ha transformado la historia del PSOE es precisamente el hecho de que votan y deciden los militantes". En esa línea, defendió el sistema de primarias como un punto de inflexión en la trayectoria del partido, en el que las decisiones las toman las bases, y no un grupo reducido de dirigentes. "Me siento una militante más", declaró Márquez.
Las palabras de Susana Díaz, más que una crítica interna
La exlíder socialista recordó con amargura su experiencia en las primarias, comparándola con la legendaria figura del Cid Campeador: "Yo fui como el Cid Campeador en lo alto del caballo, muerta", confesó Díaz. Según su versión, era bien conocido dentro del partido que se hacían llamadas a los militantes para cambiar sus votos, sugiriendo que se trató de un proceso manipulado en favor de Espadas.
Este nuevo capítulo de tensión interna añade más leña al fuego en el PSOE-A, que ha vivido en los últimos años una serie de enfrentamientos por el control de la formación en Andalucía. Desde su salida como secretaria general del partido andaluz, Susana Díaz ha mantenido un perfil relativamente bajo, pero estas recientes declaraciones muestran que las heridas del pasado no han cicatrizado por completo.
Por su parte, Juan Espadas ha optado por no responder directamente a las acusaciones de Díaz, dejando que sean otros miembros del partido quienes minimicen la controversia. Su estrategia parece orientada a centrarse en los retos electorales que tiene por delante el PSOE-A, dejando de lado las disputas internas del pasado.