“A todas, absolutamente a todas ha llamado Taguas”, asegura una fuente, aunque lo llamativo no es tanto el hecho en sí como la insistencia por parte del que fuera jefe de la Oficina Económica del Gobierno con José Luis Rodríguez Zapatero.
Taguas no ha dudado en colgarse del teléfono e insistir con la cúpula directiva de las empresas que forman parte de la patronal hasta el punto de que en algunos casos está logrando precisamente el efecto perverso. En unos, porque consideran de dudoso gusto este tipo de operativa; en otros, porque han considerado la insistencia como un gesto de impertinencia inaceptable.
Sea como fuere, no ha sido esta la única actitud de David Taguas que ha sorprendido al sector en los últimos tiempos. También lo han hecho sus últimas comparecencias en público, en las que no ha dudado en deshacerse en elogios sobre determinadas políticas que no hace mucho tiempo no eran precisamente de su agrado, en un intento también de convencer a las empresas que sus teorías pueden ser del agrado de los futuros dueños de los escaños azules en el hemiciclo.
Todo esto no ha pasado desapercibido para los miembros de la patronal, aunque desde luego no se han alejado ni un ápice de la idea de que tienen que cambiar de caballo con la llegada del nuevo Ejecutivo. Por más que Taguas sigue alimentando en vano la cuenta de resultados de las operadoras de telefonía.
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