España

Ribera admite que preferiría trabajar "de otro modo" con Podemos y critica el "ruido"

El PSOE no esconde su malestar por la práctica de los 'morados' de hacer públicos sus enfados como método de presión, que achacan a que quieren más visibilidad

La vicepresidenta cuarta del Gobierno y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, ha reconocido este jueves que le gustaría trabajar "de otro modo" con Unidas Podemos y evitar el "excesivo ruido" que en ocasiones se genera en torno a las discrepancias de ambos socios.

En una entrevista en 'RNE', recogida por Europa Press, Ribera se ha mostrado "partidaria de trabajar juntos, en equipo, en la misma habitación explicando las diferencias". "Poniéndonos de acuerdo, siendo discretos y no trasladando a la gente la sensación de incomodidad", ha añadido.

La vicepresidenta se ha expresado así después de que la tensión y la confrontación interna en el Gobierno de coalición haya vuelto a crecer esta semana, ahora, a cuenta de la subida del precio de la luz y la demanda de los 'morados' de investigar al Rey Juan Carlos I en el Congreso.

Así, Ribera ha asegurado que entiende la posición de la formación morada, porque son dos partidos que vienen de "culturas políticas muy diferentes". Así, y "estando muy de acuerdo en las cuestiones más importantes" del pacto de gobierno, la vicepresidenta ha señalado que la manera de resolver las disputas parece ser "el mecanismo" con el que Podemos se encuentra más cómodo.

Han mostrado sus diferencias en asuntos como la derogación de la reforma laboral, las políticas de vivienda o la subida de SMI

Los socios del primer Ejecutivo de coalición de la democracia moderna en España celebran su primer aniversario de gobierno inmersos en nuevas disputas, que se suman a la larga lista de debates internos que han protagonizado a lo largo de este año, como el de la derogación de la reforma laboral, las políticas de vivienda o la subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI).

El PSOE no esconde su malestar

Tanto el PSOE como Unidas Podemos restan importancia a estos debates internos, aludiendo a que en todo Gobierno, incluso en los de un solo partido, existen diferentes puntos de vista, si bien el sector socialista no esconde su malestar por la práctica de los 'morados' de hacer públicos sus enfados como método de presión, que achacan a su intento de tener una mayor visibilidad.

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