El tesorero de Podemos, Daniel de Frutos, ha negado ante el juez que investiga el caso Niñera que de la formación saliera pago alguno para Teresa Arévalo. La asesora del Ministerio de Igualdad y persona cercana a Irene Montero está siendo investigada por haber ejercido presuntamente como cuidadora de la hija menor de la ministra y Pablo Iglesias. Sin embargo, tanto Frutos como la gerente del partido, Rocío Esther Val, han negado estos hechos.
Así lo confirman a Vozpópuli fuentes presentes en el interrogatorio en el que también se ha tomado declaración como testigo al Responsable de Seguridad de Podemos, Víctor Martins, por el conocimiento que pudiera tener de la presunta actuación de Arévalo como cuidadora de la hija más pequeña de la ministra. El trámite ha sido rápido ya que los imputados solo han respondido a las preguntas del magistrado José María Escribano, la fiscal y sus defensas.
De Frutos y Val han comparecido en calidad de imputados pese a que estaban citados en un primer momento como testigos. El titular del Juzgado de Instrucción número 46 decidió cambiarles la condición una semana antes de su declaración a petición de la Fiscalía. Ambos han reiterado que Arévalo -que compareció la pasada semana- no cobró de la formación morada, cerrando de este modo la puerta a una posible administración desleal de las cuentas de Podemos.
La causa nació a tenor de una ampliación de denuncia realizada por la exabogada del partido Mónica Carmona. La que fuera responsable de Cumplimiento Normativo -que comparece el próximo martes 27 de julio- informó al magistrado al frente del caso Neurona de que había canalizado una denuncia anónima contra Arévalo. La misma advertía que la que fuera jefa de gabinete de Montero en el Congreso de los Diputados actuaba como cuidadora de la hija menor de la ministra estando a sueldo en el partido.
"La persona denunciante me indicó que la señor Irene Montero utilizaba habitualmente a esta empleada de Podemos para cuidar a su hija y que incluso se habían desplazado las tres en el mes de octubre (de 2019) a la ciudad de Alicante para participar en un acto de campaña electoral, dejando a la empleada de Podemos al cuidado de la niña mientras la señora Montero intervenía en un acto de campaña", expuso Carmona en su escrito al juez. Del mismo modo dijo que, tras realizar las pesquisas, comprobó la existencia de dicho viaje.
Al respecto los imputados han explicado que Arévalo cobró de la cámara baja cuando ejerció como coordinadora del gabinete de la portavocía de Unidas Podemos y posteriormente del grupo parlamentario, pero nunca del partido. La Fiscalía ha centrado sus preguntas en los cargos de Arévalo así como en su candidatura a los comicios de 2019. Al respecto han explicado que viajó a Alicante porque se trataba de un acto de campaña en la cual ella era candidata y que lo hizo del mismo modo que el resto de compañeros del equipo como lo pueden ser fotógrafos o responsables de redes.
Así pues han apuntado que los gastos derivados de aquel traslado fueron electorales, coincidiendo en su versión con Martins. El responsable de seguridad ha confirmado que conoce a Arévalo ya que ella era la que organizaba la agenda de Montero cuando ésta ejercía como portavoz de Unidas Podemos en la cámara baja. Cuestionado en concreto por los viajes de Montero con su hija pequeña éste ha dicho que de ese trámite se encargaban los escoltas y que no puede pronunciarse al respecto.