El primer ministro de Francia, Manuel Valls, ha elogiado públicamente la celebración de festejos taurinos en la región de la Camarga --sur del país galo-- y ha abogado por conservar esta "bonita tradición".
Valls ha presenciado una carrera camarguesa, en la cual varios hombres intentan arrancar objetos colocados en la cabeza del toro. A diferencia de la tradición española, el festejo concluye sin la muerte del animal.
En declaraciones al periódico 'Midi Libre' desde la plaza, el primer ministro ha dado su apoyo a esta práctica. "Hay que conservarla porque supone un equilibrio, para la naturaleza, para el territorio, para la economía y para el hombre", ha argumentado.
Valls, de origen barcelonés, ha evitado aclarar si prefiere las "tradiciones" catalanas o las camarguesas en cuestión de toros y ha abogado por "respetar todas", ya que "conviven". En este sentido, ha asegurado disfrutarde la "mezcla" existente en la Camarga.
Las declaraciones de Valls se han producido dos días después de la grave cogida sufrida por Francisco Rivera Ordóñez, Paquirri, en Zaragoza. El torero continúa ingresado en la capital aragonesa.