Teodoro García Egea se va sembrando dudas sobre Ayuso y el contrato de su hermano. Con un tono muy comedido, cuando se esperaba todo lo contrario, el hasta hoy secretario general del Partido Popular ha contado en una edición especial de El Objetivo en La Sexta que deja su cargo para que "se pueda dar voz a los afiliados" y que deja el cargo para facilitar la transición.
“Se nos ha acusado falsamente de espionaje”, ha lamentado García Egea, quien ha sembrado dudas sobre el contrato que el hermano de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, tenía con el Gobierno de esta región y sobre el papel de Miguel Angel Rodríguez, asesor de la la mandataria popular. Acerca del próximo congreso del Partido Popular, García Egea cree que habrá más de ún candidato a presidir el PP. Al presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, le da una probabilidad de siete sobre diez de ser elegido.
Sin embargo, el ex secretario general del PP da por buenas todas las explicaciones que dio Isabel Díaz Ayuso tras las acusaciones que lanzó Pablo Casado en su entrevista en la Cadena Cope. "Las explicaciones son satisfactorias", ha reiterado. Además, confía en que la Fiscalía archive cualquier investigación sobre el contrato del hermano a la presidenta Isabel Díaz Ayuso.
García Egea ha desmentido que Moncloa esté detrás de haber provisto la información sobre los contratos del hermano de Ayuso con este gobierno autonómico. "Todas esas noticias son falsas. Solo pretenden hacer daño gratis. La información sobre Ayuso nos llega de una fuente anónima". Ayuso es uno de los "mejores activos" del partido, ha afirmado García Egea.
El exsecretario del PP ha tenido buenas palabras para el presidente del Partido Popular: "Pablo Casado es de las mejores personas que he conocido". "Me enorgullece haber trabajado con él". Además, ha negado que Casado le haya pedido la dimisión en los últimos días. "Ser secretario general de un partido es lo más difícil que existe. Es ser el malo de la película", ha asegurado el exsecretario general de los populares.
Dimitir, "una decisión personal"
"He tomado una de las decisiones más difíciles. He decidido dejar el cargo para que se pueda dar voz a los afiliados y podamos tomar aire y empezar una nueva etapa", ha afirmado, para añadir que las "dificultades curten" las relaciones y su relación con Casado está ahora incluso "mejor".
Tras asegurar que la historia juzgará a Casado como "un hombre de principios", ha señalado --tras las críticas que ha recibido de distintos cargos-- que ha sido una decisión "personal" la de dar un paso al lado y ha añadido que ahora hay que convocar un congreso para que "decidan los militantes".
Al ser preguntado si Casado le ha pedido que se marcha, García Egea ha afirmado que es una decisión "personal" y que dejar el cargo para facilitar la "transición". Además, ha subrayado que Pablo Casado "en este momento es el líder y el presidente del PP".
Casado ultima su salida
La renuncia de Egea supone el punto y final para Pablo Casado. El líder del PP se ha plegado a las presiones que ha recibido desde todos los frentes y ha anunciado que la Junta Directiva Nacional del próximo martes convocará un congreso extraordinario para renovar el liderazgo del PP.
La crisis del PP vive sus últimas horas. Casado ha citado a los barones autonómicos a una cumbre el miércoles en Génova 13, donde les confirmará el calendario de su renuncia y la convocatoria del congreso extraordinario. En ese congreso se espera que el presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, dé un paso al frente para tomar las riendas del partido.
Los barones: "Llega 6 días tarde"
Egea fue el primer dirigente del PP al que dirigieron su mirada los principales cargos del PP tras la crisis abierta entre la dirección nacional e Isabel Díaz Ayuso. Muchos reclamaron su dimisión para rebajar el conflicto. Casado se negó a entregar a Egea. La noticia de su destitución es considerada como "positiva" por parte de los barones del partido, que esperan una Junta Directiva Nacional "más pacífica" sin el hasta ahora secretario general del Partido Popular.
La dimisión, sin embargo, no evita ya la salida de Pablo Casado, según confirman a Vozpópuli desde el entorno de uno de los principales referentes autonómicos del partido: "Llega seis días tarde. Si Pablo Casado le hubiera cesado justo antes, o justo después de la rueda de prensa en Génova el pasado jueves, habría margen para salvar los muebles. Ahora es imposible".