Pocos son los motivos que el secretario general de CCOO, Unai Sordo, ha encontrado para llamar a la movilización contra las consecuencias económicas y sociales derivadas alguna de las políticas del Gobierno central a lo largo de toda la legislatura. Sin embargo, su actividad se hace cada vez más patente en Castilla y León. Allí salió a protestar el pasado domingo contra la coalición PP-Vox y, dos días después, participó en el encuentro 'Los medios de comunicación y la irrupción de la extrema derecha' organizado en Valladolid por su mismo sindicato.
Sordo se mostró preocupado por la irrupción de los de Abascal en el Ejecutivo castellanoleonés porque, a su juicio, se trata de "una estrategia política que cuestiona de base los principios constitucionales y los principios de convivencia". Lo que 'ocurre' en esta autonomía -dice- no es más que un leve preludio de lo que podría ocurrir en España en caso de que el neofascismo alcance el poder.
Según explica CCOO en su página web, la presencia de Unai Sordo en Valladolid se debe a que ha querido mostrar su apoyo a las actividades que están llevando a cabo en la región en contra las estrategias de deterioro de la convivencia democrática, de los propios principios constitucionales y de los propios principios del Estado de derecho por parte del Gobierno de esta comunidad autónoma.
"Son fuerzas que rechazan, aunque digan lo contrario, el papel democrático de las organizaciones representativas de la ciudadanía, de los trabajadores y trabajadoras. Aunque ya no lo hacen como hace un siglo, mediante la eliminación, persecución, enjuiciamiento o cárcel de los militantes sindicales o políticos, dejan sin efecto las previsiones constitucionales sobre el papel que ejercemos, por ejemplo, las organizaciones sindicales", reivindicó el líder de la organización.
Aunque ya no lo hacen como hace un siglo, mediante la eliminación, persecución, enjuiciamiento o cárcel de los militantes sindicales o políticos, dejan sin efecto las previsiones constitucionales sobre el papel que ejercemos
Sordo acusó a Vox de mentir y divulgar bulos sobre las subvenciones de los sindicatos "mientras pasan por encima de la Ley del diálogo social de Castilla y León para dejar sin efecto el papel representativo que la Constitución otorga a los sindicatos". Por ello, exigió a Mañueco que prescindiese de su socio, ya que, a su entender, está oxigenando a la extrema derecha castellanoleonesa. "Si el PP no quiere verse involucrado en esta estrategia de deterioro de la democracia, de los derechos humanos y de los principios constitucionales, debe alejarse definitivamente de la opción de gobernar con Vox", enfatizó.
Sordo reivindica el papel de CCOO
Para finalizar, Sordo quiso aclarar que el papel del sindicato CCOO era "organizar a la clase trabajadora", "ser un vertebrador social", "ser un agente sociopolítico" y "mejorar las condiciones materiales de vida de la mayoría social". Dos días atrás, el mismo sindicato organizó una manifestación contra el Ejecutivo liderado por Mañueco. Lo hizo junto a UGT, Facua y otras asociaciones de corte feminista y ligadas al colectivo LGTBI.
De acuerdo a los organizadores de la protesta, desde que García-Gallardo llegó a la vicepresidencia del Gobierno autonómico, Castilla y León estaba siendo testigo de un "atisbo de empeoramiento de libertades y democracia". "Vamos a salir a las calles de Castilla y León por las libertades y los derechos de toda la ciudadanía, en defensa de la democracia representativa y participativa, del estado social y de derecho, por la convivencia y el respeto a la diversidad, por la legitimidad de las organizaciones de la sociedad civil y por el acatamiento a la legalidad democrática que nos hemos dado", recogía el manifiesto promovido por Sordo y demás manifestantes.
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