El líder del Partido Comunista y diputado de Unidas Podemos, Enrique Santiago, no declaró como bien en el Congreso de los Diputados la casa que prestó a Pablo Iglesias e Irene Montero en Lena (Asturias), según 'Esradio'.
El vicepresidente segundo del Gobierno y la ministra de Igualdad tuvieron que abandonar una vivienda en la que estaban pasando las vacaciones de verano por motivos de seguridad.
Tras aparecer pintadas en las que se leía "coletas, rata", Santiago, dueño de la casa, aseguró que desde hace meses ambos dirigentes políticos están sufriendo "acoso, amenazas y violencia" propiciados por Vox.
Tal y como recoge el digital, Santiago no mencionó la casa de Asturias que prestó a Iglesias y Montero en su declaración de bienes y rentas que presentó al comienzo de la legislatura en el Congreso.
Un apartamento en Madrid
En su declaración en la Cámara baja, solo declaró que poseía un apartamento en Madrid adquirido en diciembre de 2001 en régimen de nuda propiedad. Para comprarlo, según el medio citado, pidió un crédito de unos 105.000 euros a Caixabank.
Tras tener que abandonar la casa el pasado lunes por motivos de seguridad, el líder 'morado' señaló en las redes sociales que "no hay derecho a que mis hijos sufran las consecuencias del compromiso de sus padres".
Santiago cargó contra la Fiscalía después de que Iglesias y Montero suspendiesen sus vacaciones asegurando que "no hace nada"
Además, tanto el vicepresidente de Asuntos Sociales como la titular de Igualdad responsabilizaron del "acoso" a "la ultraderecha y sus medios".
Enrique Santiago, por su parte, cargó contra la Fiscalía asegurando que "no hace nada" y que debería hacerlo. El presidente del Partido Comunista indicó que "no se puede estar todo el día denunciando".
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