España

El 'efecto vacaciones' en la lucha contra la covid: mitad de vacunas que en junio y desplome del rastreo

No importa que haya pandemia o las doce plagas, cuando llega agosto, España se paraliza. Es el momento de coger vacaciones, enfundarse bañador, chancletas, camiseta hortera y poner rumbo a

No importa que haya pandemia o las doce plagas, cuando llega agosto, España se paraliza. Es el momento de coger vacaciones, enfundarse bañador, chancletas, camiseta hortera y poner rumbo a la playa. Sería divertido, si no fuera porque la vida sigue, aunque no lo parezca, y en las actuales circunstancias de pandemia es imprescindible que la administración de vacunas y el rastreo de casos se ejecute al máximo nivel.

No ha sido así. Traspasado el ecuador de agosto es evidente que las vacaciones del personal sanitario (para el que no se han buscado refuerzos) han tenido un efecto directo en el ritmo de vacunación, la secuenciación de variantes covid y la realización de test.

En los primeros quince días de agosto, se han administrado un total de 4.927.302 de vacunas. Sin embargo, si tomamos como referencia el mismo período temporal (15 días) y lo trasladamos al mes de julio, vemos que hace un mes el ritmo era superior, pues se alcanzaron las 6.601.404 de dosis administradas. Esto supone una diferencia de 1.674.102 con el simple paso de julio a agosto.

Si damos un paso más atrás y nos vamos a junio, la diferencia en el ritmo de vacunación es todavía más flagrante. Hace dos meses, España conseguía administrar 7.647.405 vacunas en un período de 15 días (casi el doble que ahora), es decir, 2.720.103 de dosis más que en agosto.

Desplome del rastreo de casos covid

Los especialistas en Salud Pública llevan desde que comenzó la pandemia clamando por un aumento en el número de rastreadores. Muchos señalan que con un buen rastreo de casos nos habríamos ahorrado unas cuantas restricciones. Algunos, ante la escasez de médicos con la especialidad de Medicina Preventiva, han propuesto un plan para formar enfermeras, pero no ha sido tenido en cuenta.

Si a lo largo de la pandemia la escasez de recursos humanos ha sido patente, en agosto las señales se han vuelto más clamorosas. Llamadas varios días después de haber dado positivo, indicaciones contradictorias sobre la cuarentena, falta de coordinación entre rastreadores, distintas versiones sobre lo que es un caso estrecho...

Pero un aspecto del rastreo donde el parón veraniego es notorio es la secuenciación de casos para conocer el mapa de las variantes covid a nivel nacional. Según el informe del Ministerio de Sanidad de este 16 de agosto, la primera semana de agosto la secuenciación de casos covid respecto a la semana anterior cayó un 50%, pasando de 1.025 muestras secuenciadas a 406 en todo el país.

Es decir, que con la llegada de agosto se analizaron en el laboratorio de cara a conocer la variante 406 casos de los 154.857 casos que se diagnosticaron esa semana. No hay que olvidar que secuenciar los casos covid nos permite conocer a qué variante pertenece cada contagio y comprobar así la marcha de la pandemia.

No hay que olvidar que la Unión Europea recomienda secuenciar el 10% de los contagios para tener cifras fiables y, según el portal Gisaid, España solo secuencia en estos momentos el 1,07% de los casos de coronavirus.

El descenso en la secuenciación de casos ha sido progresivo, al igual que el suministro de vacunas. La última semana de junio, las muestras secuenciadas ascendieron a 3.072, cuatro veces más que en la entrada de agosto.

En el tema de la secuenciación de casos también hay que apuntar la descoordinación CCAA-Ministerio de Sanidad. En su informe, Sanidad incluye datos de Madrid correspondientes a la "semana 30", que Madrid hizo públicos el 3 de agosto. Sin embargo, existen datos mucho más actualizados de Madrid, correspondientes al 17 de agosto, que además son más precisos.

Los recogidos por Sanidad apuntan a una prevalencia de la variante Delta del 57%, mientras que en el último informe de Madrid se sitúa en el 94%.

Positivo por covid en agosto

Luis María García es uno de los españoles que se ha contagiado por coronavirus en agosto y ha vivido en primera persona "el caos" que hay. Este extremeño relata así el inicio de los acontecimientos: "El jueves 12 de agosto por la noche doy positivo en un test de antígenos que me hice por haber estado en contacto estrecho con otro positivo, mi primo. Llamo al 112 y me indican que ya no hay que llamar a ese número, que llame al día siguiente al centro de salud. Al día siguiente llamo al centro de salud, explico que somos positivos y somos contactos de un positivo, le doy nombres y edades, y me indican que ya llamarán".

El viernes llaman a su primo, primero de los casos, para pedir sus contactos. Este empieza a relatar todos los contactos que ha tenido, pero el rastreador le dice que se centre solamente en convivientes. "Esa misma mañana nos dan cita para hacer la PCR". El sábado, llama a García un rastreador militar en calidad de contacto estrecho de un positivo, no como caso positivo. Es un matiz importante ya que el rastreador le dice que puede dejar su cuarentena al día siguiente al estar vacunado. García le explica que es positivo en antígenos y está esperando resultados de la PCR, a lo que el rastreador responde que entonces llamará el Servicio Extremeño de Salud.

"Nos llaman el domingo por la mañana para decirnos que somos positivos y nada más, no nos indican ni cuarentena ni fechas. Sobre esto dicen que llamemos al centro de salud". Otra vez a esperar. El lunes llamada al centro de salud: "Hablo con mi médica y me dice que haga la cuarentena hasta el domingo". Aparte de él, había dado positivo su cuñado, su hermana y su novio. Las indicaciones son contradictorias.

A su cuñado cuando le llaman siendo positivo le indican que puede salir de casa e ir a comprar pero qué tome medidas (al estar vacunado). A su hermana le dicen que puede salir al tener test de antígenos negativo y estar vacunada. Esta recuerda que tiene prueba PCR al día siguiente y entonces le dicen que mejor que no salga.

Respecto al fin de las cuarentenas, a García le dicen que el domingo 22 de agosto estaría desconfinado. A su novio (también vacunado), en cambio, le hacen segundo PCR el lunes 23, y según su resultado le darán de alta o no.

Apoya TU periodismo independiente y crítico

Ayúdanos a contribuir a la Defensa del Estado de Derecho Haz tu aportación
Salir de ver en versión AMP