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Por qué jugar a videojuegos puede ayudarte en tu carrera laboral, según Harvard

A través de los videojuegos se pueden desarrollar una serie de habilidades que pueden ser útiles en otros ámbitos de la vida

Harvard ha publicado un estudio en el que analiza el impacto que tienen los videojuegos en el desarrollo a nivel profesional. Este tipo de entretenimiento siempre ha tenido mala fama. Que el hobbie favorito de un niño sea jugar a la consola es visto como seña preocupante porque se piensa que volverá al pequeño más violento o que entorpecerá sus habilidades sociales.

Con origen en la década de los cincuenta y una popularidad en continuo ascenso desde los setenta, los videojuegos han revolucionado bastante la sociedad hasta ocupar un lugar en ella. Si con las salas de recreativos de los ochenta ya consiguieron alcanzar bastante público, con la creación de las consolas y los videojuegos online resulta extraño a día de hoy conocer a alguien que no haya jugado nunca a algún juego.

Pese a su popularidad, especialmente entre los jóvenes, estos reciben una visión negativa y llegan a ser percibidos incluso como un 'mal entretenimiento' por muchos padres y madres. Pero este hobbie puede brindar actitudes y habilidades que pueden resultar beneficiosas para otros ámbitos de la vida como la carrera laboral.

Hay múltiples estudios que comprueban que jugar a videojuegos puede ayudar a desarrollar un mejor rendimiento cognitivo en los niños, mejorar la capacidad espacial, ayudar en la capacidad de la toma de decisiones y una larga lista. Estas habilidades pueden ayudarte a funcionar de una manera más óptima en tu entorno laboral, de acuerdo con Harvard.

Beneficios de los videojuegos que puedes implementar en tu vida laboral, según Harvard

Se tiende a compartimentar las capacidades por ámbitos en lugar de expandirlas y aplicarlas en todos los aspectos posibles. Una de las habilidades que recalca Harvard que gracias a jugar a la consola se puede desarrollar es el no conformarse. El dinamismo que caracteriza los videojuegos y las destrezas que te convierten en el mejor pueden traducirse en experiencia a la hora de resolver problemas complejos, mantener la calma en situaciones de estrés o saber colaborar con personas de diversos orígenes.

El dicho popular de "no se debe juzgar a un libro por su portada" también se aplica a los videojuegos y, por ende, a la oferta laboral. De la misma manera que no hay que guiarse por la popularidad de un juego o por su presentación, lo correcto al recibir una oferta de trabajo es tomarse el tiempo de investigar tanto el puesto como la empresa para poder hacerse una idea auténtica de cómo es.

La mayoría de los videojuegos tienen el mismo funcionamiento: creación de un personaje al que se le asigna una misión y en el proceso de conseguir su objetivo se enfrenta a obstáculos e incluso puede morir, revivir y seguir intentándolo. Aunque en la vida real no cuenta con segundas vidas, también puede ser aplicable el perder el miedo a intentarlo pese al riesgo de fallar. De esta forma se iría aprendiendo de estos errores, ajustándose y mejorando en el campo laboral.

Jugando a la consola también puede ayudar a ampliar la paciencia. Morir una y mil veces intentando pasar un nivel o tener que hacer varias actividades para poder conseguir una pequeña mejora puede llegar a resultar repetitivo y desesperar. Saber aplicar la misma paciencia necesaria en los videojuegos en la carrera laboral puede resultar útil para crear un ambiente más cómodo.

Harvard explica que la creatividad es otra de las capacidades que pueden prosperar gracias a jugar videojuegos, y para esto fijarse en sus creadores es esencial. De acuerdo con un artículo de 2018 del profesor Aaron Meskin de la Universidad de Georgia, existen tres tipos diferentes de creatividad dentro del mundo de la consola. La primera es la creatividad exploradora. Este primer tipo define aquellos juegos en donde hay que pasar tareas y retos para poder avanzar en el mundillo del videojuego. La segunda creatividad es la combinatoria, que se caracteriza porque los diseñadores usan elementos de juegos anteriores creando uno nuevo.

La última es la creatividad transformadora. Se diferencia de las demás por basarse en los avances tecnológicos creando una revolución y un cambio en el ecosistema de los videojuegos. Esta es la creatividad ideal para aplicarla en el mundo laboral. Cuando algo no esté funcionando desde nuestra perspectiva, intentar algo nuevo y diferente para encontrar la solución, teniendo en cuenta cómo se resolvería el problema desde otro punto de vista. El estudio de Harvard concluye que abordar tareas laborales desde la perspectiva de los videojuegos puede ayudar a crear un mayor estímulo imaginativo que facilite el impulso de ideas y soluciones prácticas y creativas.

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