Una de las medidas que podrían aliviar la presión migratoria que se vive en Barajas sería la solicitud del visado de tránsito para los pasajeros provenientes de Mauritania. Esta iniciativa fue clave para frenar la oleada de inmigrantes que llegaron hace meses desde otros países. Ahora, el panorama se presenta mucho más complicado. Los intereses españoles en esta zona africana son un escollo para negociar con el Gobierno de Mauritania la implantación de esta medida, según informan fuentes policiales a Vozpópuli.
Los agentes de la Policía Nacional en Barajas trabajan otra vez contrarreloj para frenar esta nueva oleada de menores inmigrantes que desembarcan en España. Estos funcionarios son los encargados de confirmar las historias que cuentan estos jóvenes. Su principal cometido es comparar la lista de pasajeros que contratan los servicios de Royal Air Maroc, que es la principal forma de entrada de estos sujetos.
Y es que estos menores rompen la documentación antes de llegar a los puestos fronterizos. Hay algunos casos en las que incluso se comen los propios papeles para dificultar su identificación en estos puntos, remarcan fuentes policiales. Los agentes están confirmando que estas personas sí que son menores de edad.
Las últimas cifras diarias de llegadas de menores inmigrantes fueron las correspondientes al pasado martes cuando llegaron por Barajas un total de 26 personas. Sin embargo, las de este jueves son mucho mayores. Son 76 los inmigrantes que desembarcaron en España, según fuentes policiales a este medio. Royal Air Maroc proporcionó a los agentes los escaneos de la documentación correspondiente. También desembarcaron solicitantes de asilo.
Mauritania, clave en el sector del gas
Por esta circunstancia, se ha tenido que habilitar una nueva sala que es la Sala 2 y está ubicada en la Terminal 1 de Barajas. Allí esperan las mujeres y los niños mientras se resuelve su situación en España por parte de las autoridades. Los datos de este viernes muestran que desde Marrakech llegó un nuevo vuelo con 30 solicitantes de asilo. En este caso, son 26 de la República Centroafricana, dos de Marruecos, y una persona de Chad y otra de Costa de Marfil.
En esta nueva oleada de menores inmigrantes toma especial protagonismo el papel de Mauritania, que está siendo el punto de partida de los viajeros. La solución no va a ser fácil debido a los intereses españoles en este país.
Mauritania cuenta con un papel importante en el sector del gas. La exportación de combustibles fósiles y energías renovables es una de las grandes cartas con las que juega este país para ganar posiciones en el mercado global. Es por ello que no interesa molestar a las autoridades del país que podrían dejar de colaborar con España y producir una crisis migratoria mucho mayor de la que actualmente se vive.
Los visados de tránsito
El sindicato policial Jupol denunció que cerca de 500 menores han llegado en lo que llevamos de año de forma irregular por el aeropuerto de Barajas. Esta entidad insiste en la "necesidad" de poner en marcha mecanismos efectivos. "Una vía de entrada que este año ya ha generado dos situaciones de saturación de los medios de los que dispone el aeropuerto y la Policía Nacional que trabaja en esta instalación", explicaron en una nota de prensa.
La entidad recordó que llevan tiempo reclamando "medidas" que permitan frenar la escalada de cifras. Unos datos que, según estiman, alcanzaron las 400.000 personas el año pasado y que, si no se pone una solución, se repetirán este año, "generando diversos problemas de seguridad en el aeropuerto, como ya ocurriera a principios de año".
Por ello, solicitan de manera urgente que se deje de "poner parches" y que "afronten las medidas necesarias para solucionar este grave problema de seguridad" en Barajas. Piden la implementación de los visados de tránsito para todos los vuelos procedentes de países de África. Así se evitaría el incremento de las personas en vuelos con escala en España que aprovechan la parada para solicitar asilo de forma fraudulenta.
La versión de Interior
Desde el Ministerio del Interior se defendió el pasado lunes que las salas de asilo del aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas funcionan con "plena normalidad". "El número de personas que se encuentran en la actualidad en los espacios habilitados en el aeropuerto ronda las 30 personas", afirman fuentes de Interior.
Asimismo, afirman que las cifras difundidas por la Comunidad de Madrid, de 400.000 inmigrantes irregulares, son "absolutamente desproporcionadas y no se ajustan a la realidad" que se vive en Barajas. Por poner un ejemplo, en 2023, en toda España se recibieron 163.000 solicitudes de protección internacional, afirmaron estas fuentes.