El fin de semana vuelven las lluvias a España, después de que en muchas zonas no haya caído ni una sola gota desde el pasado 5 de enero, pero serán precipitaciones en general débiles y dispersas, salvo en el norte, y no se prolongarán más allá del martes, cuando regresa el tiempo seco y las temperaturas altas para esta época. Las previsiones meteorológicas de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) apuntan a que las lluvias que se esperan en los próximos tres días no van a compensar las cinco semanas de tiempo seco y estable que ha predominado en la mayor parte del país y el consiguiente déficit de agua que existe en muchas zonas, sobre todo en el sur.
Durante el fin de semana "varios frentes barrerán España dejando lluvias y nieve en las montañas, especialmente en las jornadas del domingo 13 y del lunes 14", ha informado Rubén del Campo, portavoz de la Aemet. No obstante, ha indicado que esas lluvias no van a ser "abundantes ni generalizadas", sino que se tratará de "precipitaciones débiles y momentáneas", salvo en Galicia, las comunidades cantábricas y Pirineos, donde podrían llegar a acumularse entre 20 y 40 litros por metro cuadrado de agua y puntualmente mas de 50 litros por metro cuadrado. En el resto del país lo más probable es que en pocas zonas se pase de los 5 o 10 litros por metro cuadrado de precipitación hasta el martes 15, jornada en la que se espera un nuevo anticiclón, que traerá otra vez cielos despejados y temperaturas inusualmente altas durante el resto de la semana.
De momento, este viernes las previsiones de la Aemet señalan que el frente que entró el jueves por Galicia dará lugar a lluvias y chubascos en las comunidades cantábricas y Pirineos. Es posible que esas precipitaciones se extiendan de forma débil y dispersa a otros puntos montañosos del tercio norte peninsular, donde se esperan nevadas por encima de los 1.500 metros y de los 1.000 metros en Pirineos. En el resto de España aumentarán las nubes pero no lloverá y también se formarán bancos de niebla en zonas bajas. Además, es posible que las lluvias que se esperan en el tercio norte arrastren polvo en suspensión presente en la atmósfera, lo que, según Rubén del Campo, podría hacer que "lloviera algo de barro, una situación que no es demasiado habitual en esa zona". El viento soplará con intervalos fuertes en el Cantábrico y nordeste de la Península y las temperaturas bajarán en la mitad norte, pero subirán ligeramente en el resto, donde los termómetros todavía marcarán más de 18 o 20 grados de máxima, con ambiente muy templado en el centro y sur.
Para el sábado se espera un ligero aumento de la inestabilidad que se traducirá en intervalos nubosos mas frecuentes y lluvias débiles en las regiones mediterráneas, excepto Baleares, sin descartar algún chaparrón débil y aislado en zonas del interior, especialmente cerca de las montañas a primera hora de la tarde. Al final del día se espera la entrada de un frente atlántico que afectará sobre todo a Galicia y a Asturias dejando lluvias débiles. La cota de nieve subirá hasta los 1.600 o los 1.800 metros, lo mismo que las temperaturas, que aumentarán por el norte pero bajarán algo en el Mediterráneo y en la mitad sur. Helará en zonas de montaña, meseta norte y páramos del centro y el ambiente seguirá siendo, en general, algo templado para la época del año en las horas centrales del día.
Entre el domingo 13 y el lunes 14 lloverá en Galicia, comunidades cantábricas, Pirineos, buena parte de Castilla y León y Extremadura y no se descartan algunas lluvias débiles y dispersas en el resto de la Península, a excepción del sur de Andalucía, regiones del sureste y Baleares. El lunes, especialmente de madrugada, existe una "alta probabilidad" de precipitaciones en prácticamente toda la Península, que no serán abundantes y afectarán sobre todo en el Cantábrico, donde podrían ser localmente persistentes en zonas costeras y algo más intensas y en forma de nieve en áreas de montaña. Las temperaturas bajan al final de la semana y principios de la próxima, excepto en el área mediterránea y Baleares, donde subirán hasta superar los 20 grados, mientras continuarán las heladas nocturnas, débiles en general, en el interior de la mitad norte y zona centro.
"Episodio de temperaturas muy altas"
A partir del martes 15 las predicciones de la Aemet indican probabilidad de tiempo estable en la mayor parte del país, a excepción de algunas lluvias en las comunidades cantábricas, Galicia y Pirineos que se prolongarían a lo largo de la semana. "Parece que podría haber un episodio de temperaturas muy altas", ha indicado Rubén del Campo, que anticipa que ese ascenso comenzará el miércoles 16 y se prolongará el jueves 17, cuando los valores pueden situarse "muy por encima de lo habitual" a mediados de febrero, sobre todo en las horas centrales del día. Entretanto en Canarias tiende a remitir la calima, regresan los vientos alisios y bajan un poco las temperaturas el fin de semana, con predominio de cielos despejados, salvo en el norte de las islas de mayor relieve, donde se esperan posibles lloviznas y heladas débiles.
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