Cuando parecía que España se encaminaba a terminar con la tauromaquia, las monteras y los capotes vuelven a estar de moda. La llegada de los gobiernos de coalición formados por PP y Vox, y la entrega de consejerías de cultura o festejos a estos últimos, ha supuesto el regreso de lo que algunos llaman tradición a muchas ciudades españolas. Desde corridas de toros a escuelas taurinas, lugares como Gijón, Alcalá de Henares o Ciudad Real recuperan sus festejos taurinos tras unos años de sequía.
Después de ocho años sin encierros en Alcalá de Henares, el nuevo gobierno de coalición pretende volver a traer esta tradición al imaginario popular de sus vecinos. La eliminación de estos actos se llevó a cabo en el año 2015, por el ejecutivo compuesto por PSOE y Somos Alcalá. Se prevé por tanto que esta actividad se retome en la celebración de sus fiestas, como se acostumbraba a hacer en un pasado.
Además, volverán las corridas a la ciudad madrileña que ya prepara su Feria Taurina para el próximo mes de septiembre. El 1 y 2 de septiembre, Alcalá de Henares acogerá figuras como El Cordobés o el Juli, que anuncia su despedida. La intención de PP y Vox es colocar a la ciudad a la cabeza de la tauromaquia en la Comunidad de Madrid, sin olvidar nunca Las Ventas.
La plaza de toros de El Bibio en Gijón ha vuelto a acoger corridas de toros este mes de agosto. La Feria Taurina de Begoña, coincidente con la celebración de las fiestas populares de la ciudad, se ha celebrado de nuevo tras su cancelación por parte de la anterior alcaldesa socialista, Ana González.
Gritos de “asesinos” y “paletos” recorrieron las calles de Gijón y las inmediaciones de su plaza de toros cuando la feria taurina dio comienzo el pasado martes. Miles de vecinos acompañados por activistas y asociaciones se manifestaron sobre la decisión del nuevo ayuntamiento de traer de vuelta los toros a la localidad.
El presidente del Principado de Asturias, Adrián Barbón, también ha mostrado su descontento con este regreso asegurando que se trata de “maltrato animal” y que los responsables "nos toman por tontos". Además, el líder del PSOE en Asturias expuso en su cuenta de Twitter todos los insultos que ha recibido tras realizar estas declaraciones.
La feria de la ciudad asturiana ha dejado momentos como la ovación a la alcaldesa del Partido Popular o la visita de Espinosa de los Monteros, al que también se ha recibido con el clamor de los asistentes.
Por su parte, Ciudad Real apostará por las escuelas taurinas. La Diputación de la capital de provincia buscará la creación de una nueva institución o la reactivación de la que existió en el pasado. Las enseñanzas estarán enfocadas a los niños, con el objetivo del gobierno de acercar la tradición taurina a los más pequeños y así preservar su legado.
Esta medida tampoco ha quedado exenta de polémica, pues familias y asociaciones temen el peligro de acercar a los menores a este tipo de actividades. Los detractores de esta propuesta recurren a la recomendación de la ONU de alejar a los más pequeños de la tauromaquia, realizada por el Comité de los Derechos del Niño de Naciones Unidas.
En Canarias, las corridas de toros están prohibidas por ley desde el año 1991, y, por su parte, en Cataluña llevan años sin celebrarse estos espectáculos, con un intento de prohibición en el año 2010. Parece ser que estos son los territorios españoles que se mantendrán firmes en su decisión, mientras las plazas de toros del resto del país se vuelven a vestir de luces.
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