Los mensajes que Juan Lobato llevó al notario a principios de noviembre implican de manera directa a Moncloa en la filtración de un correo sobre la pareja de Isabel Díaz Ayuso. Tanto estos Whatsapps como las actas notariales, a las que ha tenido acceso Vozpópuli, demuestran que la jefa de gabinete de Óscar López, le remitió este documento y que el exdirigente socialista se negó a publicarlo si no estaba en prensa, ante el temor de que pudiera cometer un delito revelándolo.
Lobato ha aportado estos mensajes y el acta notarial de los mismos al magistrado que le ha tomado declaración como testigo en el Tribunal Supremo. Fuentes presentes en su comparecencia explican a este medio que el instructor Ángel Hurtado le ha requerido su teléfono personal tras constatar que dichas actas no estaban completas. Lobato ha accedido a la solicitud de manera voluntaria y el juez ha procedido al volcado del mismo.
En su declaración, que se ha alargado durante una hora y media, ha confirmado los extremos que evidencian estos mensajes. Además, ha dicho que el domingo, tras publicar ABC que existían estos mensajes y que los llevó ante notario, recurrió al secretario de organización del PSOE, Santos Cerdán, y a Pilar Sánchez Acera (jefa de gabinete de Óscar López) para consensuar la respuesta. La misma consistió en un comunicado que hizo público en su cuenta personal de la red 'Bluesky'.
Moncloa tenía el correo
Para entender el giro que ha dado el caso contra el fiscal general del Estado hay que remontarse al 13 de marzo. Entonces el diario El Mundo publicó que la Fiscalía ofreció un pacto a Alberto González Amador, pareja de la presidenta madrileña, en el marco de la investigación abierta contra él por dos delitos fiscales y falsedad documental.
Los Whatsapps evidencian las dudas de Lobato: "¿La carta cómo lo tenemos?" La necesito diciendo de dónde la saco, porq si no parece q me la ha dado la Fiscalía".
El fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, reaccionó solicitando todos los correos al fiscal que le investigaba, Julián Salto, y, tras ello, armó una nota de prensa que se difundió ya la mañana del 14 de marzo, en la que desmentía este extremo. Sin embargo, entre la noche del 13 de marzo y la mañana del 14, varios medios se hicieron eco del contenido de los correos (sin publicarlos). Estas informaciones vieron la luz minutos después de que el fiscal general los recibiera en su 'mail' personal.
De hecho, el correo del abogado de González Amador no se publicó hasta pasadas las 9:00 horas. Esta fecha es determinante porque casi una hora antes Juan Lobato recibió un primer Whatsapp de Pilar Sánchez Acera. En concreto, a las 8:30 horas le pasó la carta del abogado en la que reconocía el delito del empresario y ofrecía un pacto a la Fiscalía. "Cuidado con los datos personales. Se puede sacar", le trasladó la jefa de gabinete de Óscar López.
"¿La carta cómo la tenemos?"
La instrucción de Acera era clara: sacarlo en la sesión de control que se iba a celebrar ese mismo jueves en la Asamblea de Madrid. "Sácasela en la pregunta", le ordenó Sánchez Acera, quien le remitió también el textual que tenía que decirle a la mandataria regional. "¿Quién miente señora Ayuso? Usted o su novio?", le trasladó. Lobato se mostró muy cauto con el documento, a sabiendas de que es material confidencial.
"¿Pero se ha publicado en algún sitio esta carta? No tiene fecha. ¿La carta cómo la tenemos?", preguntó. "Porque llega, la tienen los medios"; respondió la jefa de gabinete del ministro López, dejando ver que desde Moncloa serían conocedores de que este correo lo tenían algunos periodistas. Para tranquilizarle, le dijo: "Vamos a verlo. Para q estés más respaldado. Si es así, te lo digo. Si no, lo tienes en la retaguardia". De esta forma Sánchez Acera evidenció que podrían conocer qué medios tenían este correo confidencial y que lo iba a averiguar.
Lobato le agradeció la gestión para, así, poder explicar en rueda de prensa el medio que la había publicado, evitando además que se le pueda achacar delito alguno. "Pero la necesito diciendo de dónde la saco, porq si no parece q me la ha dado la Fiscalía". Acto seguido Sánchez Acera le explicó que el correo en cuestión iba a publicarse antes de la sesión de control. "A las 11 ya habrá salido todo el undo con ella", escribió, demostrando de nuevo que sería conocedora de la actuación de los medios.
El acta notarial: "En defensa de sus intereses"
Efectivamente, tal y como había adelantado, el documento se publicó el El Plural a las 9:06 y ella así se lo hizo saber. "Ya está", le comunicó a Lobato y, tras ello, le remitió el textual que tendría que leerle a Ayuso en la Asamblea.
De los mensajes se desprende que Lobato se habría negado a hacer pública la carta hasta que, al menos, se publicara en los medios de comunicación y por ese motivo, terminó llevando esta cadena de Whatsapps a un notario. El hasta ahora secretario general del PSOE de Madrid acudió a que dieran fe de todo este material después de que el Tribunal Supremo decidiera abrir causa contra García Ortiz por revelación de secretos.
El acta recoge los mensajes, el correo en cuestión y los datos adjuntos que le envió la jefa de gabinete de Óscar López. "Que, en mejor defensa de sus intereses, para presentar este documento, en su caso, dodne preciso fuere, me requiere a mi, el notario, para que deje constancia en este documento del contenido de la conversación, documento adjunto a la misma, así como el contenido de la dirección de la página web de internet incluida", refleja el acta que ahora obra ya en posesión del Tribunal Supremo.
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