La guerra sucia dentro de Unidas Podemos lleva a la izquierda del PSOE a su enésimo mal rollo. La secretaria general morada, y ministra de Derechos Sociales y Agenda 2030, Ione Belarra, se enteró por la prensa de la cita de este lunes en Moncloa entre el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo. El problema es, según ha sabido Vozpópuli, que la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, sí estaba al tanto, así como el secretario general del PCE y hombre de Justicia de Unidas Podemos, Enrique Santiago, quien fue purgado por Belarra tras el lío de la coalición en Andalucía.
Podemos exigió este lunes estar presente en las negociaciones entre el PSOE y el PP y no quedarse fuera de la renovación. Pero el ministro de Presidencia, el socialista Félix Bolaños, solo departe con la ministra de Trabajo pese a que mantiene una gran relación personal con Belarra. El lado socialista del Gobierno quiere "estar coordinado" con su socio. Pero en ese asunto, pesa más la situación interna de Unidas Podemos.
El inconveniente para los de Ione Belarra es que Yolanda Díaz no da explicaciones directas a Podemos. Los morados, en verdad, solo piden pactar antes con el PSOE la posición común a la hora de sentarse en la mesa con los de Feijóo. Pero lamentan que Ferraz les aparte y sucumba a la lógica bipartidista.
Enrique Santiago, en cuarentena
Los morados, además, no se fían de Santiago. Esa es la sensación que transmiten con su insistencia a la hora de reclamara voz y voto. Pese a que el líder comunista pertenece al núcleo duro de coordinación del grupo parlamentario (donde están los morados), lo cierto es que la cabeza visible de Podemos en el Congreso, el portavoz parlamentario, Pablo Echenique, no tuvo constancia alguna de la cita 'clave' de este lunes. Las fuentes consultas, no obstante, reiteran que lo importancia para Podemos no es estar al tanto de las reuniones, sino llegar a ellas con los temas pactados con el PSOE-
Bolaños será quien negocie en nombre de todo el Gobierno y el eurodiputado del PP Esteban González Pons será el hombre de Génova para llegar a un acuerdo que se presupone complicado. Y eso que el Gobierno evitó aclarar si se abre a no cambiar el método de elección de los vocales como exigen los de Feijóo. No obstante, fuents gubernamentales socialistas consultadas por este diario inciden en que el hecho de que el Poder Judicial se encuentre descabezado tras la dimisión de Carlos Lesmes no cambia un ápice la postura del Ejecutivo respecto al método de elección.
Un embrollo similar al del gasto en Defensa
La cita de marras entre Sánchez y Feijóo ha sido un embrollo similar al del incremento del gasto en Defensa. Cabe recordar que la vicepresidenta segunda sabía que Moncloa engordaría un 25% los recursos disponibles para la cartera que agarra Margarita Robles. Mientras que Podemos alegó desconocer el dato. Y eso que cerraron el acuerdo sin, supuestamente, haber accedido por primera vez al desglose de cada partida.
Aquel roce evidenció la tensión que existe entre Yolanda Díaz y Podemos. Los morados, según las fuentes consultadas, están inquietos con la titular de Trabajo, ya que no comparte ninguna de las decisiones que toma. Es más, la mesa confederal, ese foro informal que reúne a los líderes de los partidos que forman parte de la coalición de Unidas Podemos (Podemos, Izquierda Unida, En Común Podem, Galicia en Común), lleva meses sin juntarse para escuchar las directrices de Yolanda Díaz.
Todo apunta al "electoralismo" de Podemos, un partido que ha hecho del 'No a la guerra' un arma electoral en plena escalada militar entre Rusia y Ucrania. Y que, ahora, pretende hacer lo propio con la mesa de diálogo entre populares y socialistas para desbloquear la renovación del Poder Judicial: dado que barruntan que puede salir un acuerdo que no les beneficie en términos electorales, no hay nada como denunciar que no entran en la cocina y no se enteran de nada.
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