La pornografía tiene mala reputación. Es considerada muchas veces como machista e irreal. Y aunque pueda que haya algo de razón en ello, a los vídeos porno se les puede sacar mucho partido, sobre todo en pareja.Hay que dejar atrás los miedos, el puritanismo y las inseguridades y dar el paso de experimentar lo que es ver cine X con nuestro amorcito. Si nunca lo habéis hecho, al principio será raro. Deberéis eso sí poneros de acuerdo antes sobre qué tipo de vídeo queréis ver: si trío, orgía, rubios, morenos, jóvenes, maduritos, etc.Una vez que ambos estéis de acuerdo en la trama (si es película) o en el tipo de vídeo (aquí de trama más bien poca), habéis de poneros cómodos y disfrutar de lo votado con total libertad, porque además de divertido y diferente puede proporcionaros numerosos beneficios como pareja. Os los contamos.[El porno que enfrenta a las mujeres]
1) Os pondrá a mil
Todos tenemos dentro un voyeur que no le dejamos salir a la luz. Nos excitamos viendo escenas subiditas de tono en las películas y leyendo pornografía erótica, pero aún no hemos dado el paso de ver cine X en pareja.Ver cómo otras personas se excitan mutuamente es tremendamente 'hot' y os llevará a querer sumaros a la fiesta en menos de lo que canta un gallo. Palabrita.
2) Podéis coger ideas
Las parejas que llevan mucho tiempo juntas al final siempre acaban haciendo lo mismo. Y si son fieles, no intiman con nadie más, lo que les lleva a no coger ideas nuevas para practicar en horizontal. Un efecto negativo de la monogamia que se puede arreglar con el (buen) porno.Carlyle Jansen, terapeuta sexual, asegura en 'Bustle' que para esto es perfecto: "Muchas personas lo utilizan para coger ideas. Decirle a tu pareja 'ey ¿por qué no hacemos esto?". [Cómo hacer que un hombre tenga el mejor orgasmo de su vida (literal)]
3) Es una buena forma de conocer lo que os excita
Si nunca te han dado unos cachetes en el culo no puedes saber si te gustan, igual que el sexo anal, por poner unos ejemplos. Pero si los ves en una peli porno y te pones cachondo, es más que probable que quieras experimentarlo en la vida real, ya sea como emisor o receptor.También es una buena forma de conocer a tu pareja. El tema de la sexualidad sigue siendo tabú incluso entre las personas que viven bajo el mismo techo. Hay una especie de miedo a pedir cosas en la cama o a proponer hacerlas. Y al final por unos o por otros nunca se llevan a cabo los verdaderos deseos. Por eso el porno puede servir de puente y facilitar la comunicación.
4) Es genial para seguir siendo fiel
La monogamia en los tiempos que corren es difícil. El mercado del amor cada vez es más amplio y nosotros somos demasiado volubles e insatisfechos para valorar lo que tenemos en casa. Por eso ver porno con la pareja puede darnos ese toque de novedad y pasión que necesitamos para mantener la chispa viva. Es como hacerlo con otras personas y hacerlo a la vez con nuestra pareja.
5) Es perfecto para liberarse
Todo esto sólo lleva a un camino: la liberación sexual, y en casa. Si además de ver porno os empezáis a tocar y acabáis haciéndolo mientras otros desconocidos lo hacen al otro lado de la pantalla, tendréis una especie de sensación de orgía y libertad muy placentera. Sacaréis vuestra vena más juguetona y ardiente y amaréis a vuestra pareja más que nunca, porque no hay nada que una más que no tener barreras que os separen.
Y esto es todo, lector. ¿Te hemos convencido? ¿Ya lo haces a veces?
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