Javier Gerardo Milei hizo historia el 19 de noviembre de 2023 cuando ganó la segunda vuelta de las elecciones a Presidente de Argentina —a la que se llama "balotaje"— al que por entonces era ministro de economía del gabinete de Alberto Fernández, Sergio Massa. Desde ese mismo momento, el mundo asistió atónito al mayor experimento de liberalismo económico de la historia, el que involucra a todo un país de 46 millones de habitantes, y durante el cual se pretende recuperar a un país que estaba en riesgo de hiperinflación y sumido en una catástrofe financiera a la que la había condenado el peronismo.
10 meses después de la asunción de Javier Milei, el líder y fundador de la coalición —ahora partido— La Libertad Avanza ha conseguido obrar ya parte de ese milagro. Fue precisamente el 10 de diciembre de 2023 el día en el que reconoció ante la nación que durante su mandato recortaría en un principio unos veinte mil millones de dólares del gasto público, lo que supondría "un shock" ante el que no había alternativa: "Naturalmente, ello impactara de modo negativo sobre el nivel de actividad, el empleo, los salarios reales, la cantidad de pobres e indigentes", avisaba Milei desde la escalinata de la Plaza del Congreso nada más ser investido. Dicho y hecho.
"Hay que recordar que gana las elecciones por una narrativa espectacular que entroniza el enojo social y la frustración del ciudadano promedio con la clase política", asegura a Vozpópuli Máximo Paz, profesor del Máster en Márketing y Comunicación Política del ESIC. "Ahora, tras diez meses de mandato, la aprobación del Gobierno ha caído al 40%, lo cual no es malo en términos cuantitativos si se considera la magnitud del tratamiento de choque implementado", asegura este experto argentino.
Las medidas que ha puesto en marcha Milei han logrado que Argentina avance más rápido de lo previsto en materia económica y financiera, consiguiendo el primer superávit fiscal trimestral en 16 años, la desaceleración de la inflación y una reducción drástica del riesgo país.
"Para ponerlo todo en un contexto, tenemos que analizar la herencia que se encontró Milei después de todos los años que hubo de peronismo", asegura el director del MBA con especialización en finanzas del IEB Aurelio García del Barrio en referencia al kirchnerismo, que no es más que una vertiente reciente del peronismo que se ha basado en intervencionismo, la falta de seguridad jurídica —como fue el caso de expropiación a la española Repsol— y la impresión descontrolada de billetes para corregir la inflación de forma artificial.
"Así solo se conseguía darle una patada hacia adelante al problema", asegura el profesor del Instituto de Estudios Bursátiles (IEB), "que iba creciendo como una bola de nieve y provocaba cada vez más inflación", apunta García del Barrio, experto en la situación económica y financiera de Argentina y Brasil.
La motosierra de Milei en Argentina
Una de las primeras medidas que llevó a cabo Milei en Argentina fue la de reducir las "transferencias discrecionales" que el Estado asignaba arbitrariamente a las provincias —como denomina oficialmente la Constitución a los 23 estados federados de la nación—, lo cual le produjo mayores animadversiones políticas. También, la anulación de las obras públicas, con lo que se le incrementaron los problemas. Y no hay que olvidar la drástica reducción de los subsidios, que afectaron a los ciudadanos que hasta entonces disfrutaban artificialmente de un transporte y una energía muy por debajo de su precio real.
Sin embargo, nada de lo anterior es comparable con el recorte tan contundente que llevó a cabo en las instituciones pública. Además de recortar el número de ministerios y secretarías, Milei despidió a todos los funcionarios que contaban con menos de dos años de antigüedad, con lo que 7.000 personas quedaron en la calle de forma automática en Argentina tan solo diez días después de su asunción como presidente. 5 meses después, la cantidad de funcionarios públicos se había reducido de 341.373 a 322.250, un 5,6%.
Solo así el gabinete de Milei ha conseguido ordenar las cuentas públicas, desacelerar la inflación, la brecha de cambio y fomentar las inversiones. "Hicimos el ajuste fiscal más grande de la historia de la humanidad", aseguró el presidente en su discurso ante los empresarios más importantes de Argentina en el Consejo de las Américas.
La pobreza en Argentina no deja de aumentar (de momento)
Tal y como adelantó Milei, el número de pobres no ha dejado de aumentar, algo que está mellando su popularidad entre el electorado, aunque "lo peor ya pasó", quiso matizar en el Consejo de las Américas para ganar la confianza de los empresarios, que asisten con congoja a la bajada de la demanda.
"Las críticas a la gestión de Milei se focalizan en la caída del poder adquisitivo", subraya Aurelio García, del IEB. "Eso se ha traducido en una reducción del consumo privado y, además, la administración pública está reduciendo las inversiones. Por eso baja la demanda. Es absolutamente normal. Estas son unas consecuencias esperadas que lo que persiguen, que es el control inflacionario", el que ha sido el mayor problema económico del país y del que ahora se están percibiendo sus verdaderos efectos. "En economías avanzadas, como las de Unión Europea o Estados Unidos, también hemos visto situaciones inflacionarias, aunque no a los niveles de Argentina", compara el profesor.
El 52,9% de la población de Argentina está en estos momentos por debajo del umbral de la pobreza, según el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos de Argentina (INDEC). La situación es aún peor para una parte de esos pobres que no tienen dinero ni para lo que se denomina Canasta Básica Alimentaria. Son, en concreto, el 18,1%, es decir, casi uno de cada 20 argentinos.
Esto ocurre debido al orden en el que están aplicándose las políticas económicas, como explica Aurelio García en declaraciones a Vozpópuli: "Existen dos corrientes desde el punto de vista macroeconómico: la que busca el control de la inflación y los tipos de interés —la monetarista— y la que persigue el crecimiento económico y el empleo —la keynesiana—. Y tienes que decantarte entre una de las dos, porque bajar la inflación perjudica el crecimiento", asegura.
Llegados a este punto de la explicación académica, el director del MBA con especialización en finanzas del IEB explica que este ha sido el orden correcto: primero hay que controlar la inflación para normalizar la economía, como ha hecho el equipo de Milei, y luego se pueden modificar otro tipo de leyes cuando esté más moderada.
Ley de Bases o Ley Ómnibus de Milei
La famosa Ley de Bases pasó a la historia como la que más cambios implicó con casi 350 artículos. Se planteó como proyecto de Ley de Bases y Puntos de Partida para la Libertad de los Argentinos el noviembre, aunque el Senado la devolvió a la cámara baja en junio con algunos puntos alterados.
El paquete incluía medidas tan polémicas como constituir en sociedades anónimas las empresas públicas de Argentina para poder privatizarlas posteriormente, la posibilidad de contar desde el Ejecutivo con facultades que habitualmente le corresponden al Legislativo, una reforma laboral que beneficia a los empresarios y la creación del impuesto a la renta de los trabajadores.
La producción de petróleo también ha aumentado hasta alcanzar cifras de hace 22 años al eliminarse los topes. Así, Argentina ha conseguido superar los 5.660 millones de dólares de exportaciones energéticas entre enero y julio, un 28,5% más que hace un año con Alberto Fernández de presidente de Argentina.
El Capital Humano de Milei de Argentina
Desde la llegada de Milei, en Argentina, las políticas sociales son materia del ministerio de Capital Humano, que antes correspondían a cinco ministerios: los de Educación, Desarrollo Social, Trabajo, Empleo y Seguridad Social.
También estaba adscrita a este ministerio la secretaría de Protección Contra la Violencia de Género, que pronto se transfirió al de Justicia para acabar siendo suprimida por “propagar e imponer una agenda ideológica”. El lenguaje inclusivo fue prohibido y los fondos destinados combatir la desigualdad de género se recortaron un 33%.
A los 8 días de estar en el cargo, el presidente anunció que duplicaría la asignación por hijo y que aumentaría un 50% la tarjeta familiar, ayudas que fueron aplaudidas. En cambio, al mismo tiempo, se hizo saber que las personas que participasen en manifestaciones perderían el acceso al plan social en caso de recibirlo.
En materia de vivienda, el Milagro deja ver sus primeros frutos. El precio de los alquileres ha caído un 26% después de abolir la Ley de Alquileres en enero, mes en el que el precio de los arrendamientos bajó un 6,7%, una cifra que continuó bajando en los siguientes de la serie hasta asentarse en un 26,6% en Buenos Aires y alrededores. El fin de la desregulación del alquiler —que obligaba a contratos de, al menos, 3 años— consiguió que se disparase la oferta hasta casi duplicarse los pisos que han salido al mercado de los alquileres.
El futuro de Argentina
Así las cosas, el futuro es esperanzador en Argentina después de tocar techo en cuanto a los indicadores de pobreza. Más de la mitad de los ciudadanos del país son pobres (52,9%) y uno de cada cinco, además de pobres, indigentes (18,1%), tal y como indica el INEC.
"La infección todavía está ahí", alerta el profesor argentino del ESIC Máximo Paz. "Tal vez no sea incorrecto hacer una proyección positiva en caso de que el presidente logre sostener la consistencia política y técnica de sus medidas, pero dependerá en gran medida de la reconstrucción de la confianza, sobre todo en los inversores globales".
En este sentido, Paz cree que se le pide mucho a Milei: "Que en pocos meses redefina el perfil cultural, político y económico de un país acostumbrado a incumplir sus compromisos. No es imposible, pero tampoco simple: hay agentes sociales potentes en Argentina —sindicatos, lobbies empresarios, etc.—que con un nuevo modelo se transformarían en grandes perdedores y no lo desean".
En cuanto al cepo cambiario que limita el cambio de pesos a dólares, tan prometido en la etapa electora, aún tendrá que esperar. Para dolarizar la economía “no había dólares suficientes en el país” porque había que convertir todos los pesos y los depósitos en dólares. “Ha llevado a cabo duras reformas en el Banco Central con el objeto de reducir la inflación e incrementar sus reservas de dólares”, afirma Aurelio García del Barrio. Dolarizar supone cambiar cada peso por un dólar, como ya se hizo en su día.
De este modo, dejaría de necesitarse un Banco Central Argentino. "Yo disiento hasta cierto punto con Milei en que el Banco Central sea un elemento inútil, como él defiende", dice García del Barrio. "En realidad, creo que puede tener sus funciones bien gestionadas, pero no lo estaban”.
"Es imposible aventurar con certeza el resultado de los próximos años", reflexiona el argentino Máximo Paz cuando se le pregunta por el futuro de Argentina cuando acabe la primera legislatura de Milei. "No por nada hoy es famosa la frase 'el argentino nace donde quiere'. Lo que si podemos leer son los indicadores: parece que los mercados locales e internacionales reaccionan positivamente a los aciertos del presidente".
Conferencias de Manuel Adorni, vocero presidencial
"¿Qué tal, Fabián?, ¿Cómo te va?", saluda efusivo el portavoz de Milei ante la prensa en la rueda de prensa de cada día. "Bien", le contesta con menos alegría Waldmand, de FM La Patriada. Es el juego que se trae ante sus colegas Manuel Adorni (periodista, La Plata, 44 años) en el mano a mano que se le presenta todos los días en la Casa Rosada y que es visto por miles de espectadores a través de internet mientras lidia con incómodas preguntas que, frecuentemente, esconden cierta parcialidad y, con toda normalidad, muestran la ideología política del que pregunta.
"Se trata de un periodista correcto, devenido en gran vocero presidencial", asegura el profesor del Máster en Márketing y Comunicación Política Máximo Paz. "Su incorporación al gobierno ha sido definitivamente un acierto, dado que es una figura que, por sus habilidades mediáticas, es capaz de moderar la forma de enunciación de las ideas del presidente", matiza el argentino.
Lo cierto es que los medios de comunicación se han quedado sin la "pauta publicitaria", el dinero público que acaba en los medios y repartidos de forma discrecional, quizás un motivo para que medios que "antes no criticaban a Javier Milei ahora lo hagan sutilmente", como explica el profesor. "Los medios más afines al peronismo, por su parte, se han manifestado siempre en contra de su gestión y los que antes eran opositores al kirschnerismo ahora han relatado positivamente sus decisiones", afirma.
"Adorni no modera el contenido de las ideas libertarias sino que modera la forma de expresión de las mismas y de esta forma le da continuidad al relato de La Libertad Avanza de una forma mucho más organizada", explica Paz. "Así, se constituye un aporte genuino a la continuidad del Gobierno que precisa de la comunicación como herramienta fundamental para atemperar, direccionar y explicar la magnitud y propósito de las decisiones que va tomando. Ser y parecer se constituyen como dos dimensiones fundamentales de gestión. El presidente lo repite siempre: hago lo que digo y digo lo que hago", explica el experto del ESIC Business&Marketing School.
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