El primer ministro de Reino Unido, Rishi Sunak, ha anunciado en la tarde de este miércoles el especulado adelanto electoral para el próximo 4 de julio en una rueda de prensa en el número 10 de Downing Street.
El anuncio se ha producido después del Consejo de Ministros que ha mantenido esta tarde. Ahora, solicitará al rey, Carlos III, la disolución del parlamento cumpliendo con el margen estipulado de seis semanas hasta los comicios.
"Ahora es el momento de que Reino Unido elija su futuro", ha señalado el 'premier' británico, que ha repasado alguno de los logros recientes "durante el momento más complejo desde la Segunda Guerra Mundial" y ha destacado, entre otros, la mejora de los datos económicos.
Sunak, en el cargo desde 2022, había repetido hasta ahora que las elecciones tendrán lugar en la segunda mitad de este año. Sin embargo, las conjeturas de la oposición laborista se han vuelto realidad con el anuncio de las elecciones en una fecha que entraría en la mencionada segunda mitad del año.
"La especulación abunda, así que creo que el público merece una respuesta clara a una pregunta sencilla. ¿Tiene el primer ministro la intención de convocar elecciones generales en el verano o tiene miedo?", preguntó el líder del Partido Nacional Escocés (SNP) en la Cámara de los Comunes del Parlamento, Stephen Flynn, durante una sesión de control.
A esta pregunta, Sunak respondió: "Alerta de aguafiestas: habrá elecciones generales en la segunda mitad de este año". En ese sentido, agregó que el Partido Laborista, primero de la oposición británica, "pondría en riesgo la estabilidad económica ganada con tanto esfuerzo", y avisó que los conservadores "están brindando un futuro seguro al Reino Unido".
Ahora mismo, el partido de Sunak está por debajo de los laboristas en las encuestas electorales. Según publica The Times, el Partido Conservador tendría solo el 23% de la intención de voto, mientras que el Partido Laborista, ahora en la oposición, alcanzaría el 44%
Caída de la inflación
Los analistas políticos vinculan el posible adelanto electoral al verano a los nuevos datos sobre la inflación interanual británica de este mismo miércoles, que ha bajado en abril al 2,3% frente al 3,2% en marzo, por lo que se sitúa en el nivel más bajo en casi tres años. Esta fuerte caída coloca a la inflación cerca del objetivo del Banco de Inglaterra de situarla en el 2%.
Poco después de divulgarse las cifras de la inflación, el primer ministro dijo a los medios que, "gracias al arduo trabajo y la resiliencia de todos, hoy hemos alcanzado un hito importante y la inflación ha vuelto a la normalidad".
"Este es un momento importante para nuestro país, para la economía, y demuestra que nuestro plan está funcionando. Aunque sé que la gente apenas está empezando a sentir los beneficios y que hay más trabajo por hacer, espero que esto les dé la confianza de que si nos atenemos al plan, habrá días mejores por delante", agregó.
La inflación continúa su tendencia a la baja después de que llegase a superar el 11% en 2022, a raíz del incremento de los precios energéticos por la invasión rusa de Ucrania, por lo que el Reino Unido se vio obligado a subir los tipos para frenar el alza.
Se espera que el Banco de Inglaterra empiece a reducir este año los tipos de interés, actualmente en el 5,25%, su nivel más alto desde 2008.
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