El presidente de Bielorrusia, Alexander Lukashenko, ha anunciado este domingo que se presentará a un séptimo mandato de cara a las próximas elecciones presidenciales en 2025 tras depositar su voto en las urnas para elegir a los miembros del Parlamento. "Lo haré, lo haré", ha indicado al ser preguntado por la prensa en el colegio electoral, agregando que hará "lo que sea necesario por Bielorrusia", si bien ha recordado que "aún queda un año antes de las elecciones presidenciales", por lo que "muchas cosas pueden cambiar", según ha recogido la agencia de noticias BelTA.
Asimismo, ha aseverado que los observadores de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE) "no pidieron" asistir a los comicios locales. "Si quieren, que vengan. Después de las elecciones, que vengan", ha argüido. La opositora bielorrusa, Svetlana Tijanovskaya, ha asegurado en un vídeo publicado en la red social X, anteriormente conocida como Twitter, que "los intentos del régimen de utilizar estas elecciones falsas para legitimar su poder no tendrán éxito".
The #Belarus regime's so-called elections today fail to meet any democratic standards, resembling more a military operation against its own citizens, the constitution & common sense. I urge Belarusians & the international community to categorically reject this sham. pic.twitter.com/oPDqDvvQpQ
— Sviatlana Tsikhanouskaya (@Tsihanouskaya) February 25, 2024
En este sentido, ha indicado que es fundamental mantenerse "firmes" y "no reconocer la legitimidad de estas elecciones y sus resultados". "El pueblo de Bielorrusia merece elecciones auténticas, justas y equitativas", ha indicado.
"Esta supuesta campaña electoral no ha cumplido ningún estándar democrático. Todos los partidos políticos no leales al régimen y los medios de comunicación independientes han sido silenciados. Todos los candidatos de la oposición tienen prohibido participar", ha precisado, recordando que a los observadores de la OSCE se les negó participar en los comicios.
Asimismo, ha indicado que el pueblo bielorruso ve más allá "de esta farsa, de esta fachada de democracia" y que "es crucial que la comunidad internacional haga lo mismo". "Les pido que apoyen a Bielorrusia en este momento crítico y reafirmen su compromiso con los principios de la democracia y los Derechos Humanos", ha indicado.
La OSCE condenó a principios de enero la decisión del Gobierno bielorruso de no invitar a los observadores del organismo, denunciando que esta medida está en contra de los compromisos internacionales del país europeo.
Los bielorrusos están llamados a renovar diversas instituciones regionales y locales, si bien el foco está puesto en los 110 escaños de la Cámara de Representantes -la Cámara Baja del Parlamento-, que se repartirán en virtud de un sistema de circunscripciones uninominales en las que el candidato más votado obtiene la victoria.
Lukashenko consiguió en agosto de 2020 un sexto mandato tras ganar con el 81 por ciento de los votos frente a Tijanovskaya en medio de una serie de protestas que aludían a un supuesto fraude para perpetuar en el poder al actual presidente, en el cargo desde 1994.
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