Tres semanas. Quedan exactamente 23 días para descubrir quién será el siguiente ocupante de la Casa Blanca. De acuerdo con diversas encuestas realizadas la semana pasada, la demócrata Kamala Harris, actual vicepresidenta de Estados Unidos, se llevaría la victoria en las elecciones del próximo 5 de noviembre.
En las anteriores elecciones Joe Biden "era la mejor opción para derrotar a Donald Trump", comenta a Vozpópuli Jason Xidias, profesor de Relaciones Internacionales de la Universidad Pontificia Comillas. Durante su mandato (2020-2024) ha conseguido varios logros, como la coordinación de la OTAN para apoyar a Ucrania o la aprobación de leyes importantes -Ley de Reducción de la Inflación-, pero este último año la imagen que Estados Unidos tiene de él ha cambiado.
La decisión del Partido Demócrata por retirar la candidatura de Biden y apostar por Kamala Harris, aunque repentina y arriesgada, "ha sido un acierto" y así ha quedado demostrado en los datos. Las donaciones han subido y en las encuestas, bastante reñidas entre ambos candidatos, Harris se posiciona por encima de Trump desde agosto -de media-. No obstante, pese a recibir menor puntuación, el republicano ha mejorado sus resultados esta última semana.
Los sondeos reflejan que "Estados Unidos está más polarizado que nunca" y "que será una contienda muy reñida en los estados bisagra (swing states) hasta el final", indica el profesor de Relaciones Internacionales. A pesar de que Harris es una candidata poco conocida por la población y no estén muy informados de sus políticas, "muchos votarán por ella porque se sienten aliviados de que Joe Biden se haya retirado y porque desean derrotar a Trump de una vez por todas".
Los estados bisagra son claves para conseguir llegar a la Casa Blanca. "Ambos candidatos tienen varios caminos hacia la victoria, y es probable que el resultado no esté claro hasta después del día de las elecciones", señala el experto consultado por Vozpópuli. "Pensilvania se perfila como el estado más crucial", añade.
Sin embargo, que las encuestas posicionen a Kamala Harris levemente por delante no garantiza su victoria el 5 de noviembre. Podría repetirse el mismo resultado de las elecciones de 2016, donde Hillary Clinton consiguió más número votos, pero Donald Trump obtuvo la victoria en más estados, consiguiendo así salir electo como presidente de los Estados Unidos. "Muchos en el partido (demócrata) desearían eliminar el Colegio Electoral, ya que lo consideran antidemocrático", menciona Xidias.
Aunque esté dando buenos resultados, la candidatura de Harris ha llegado a unos meses de las elecciones. Xidias explica que el Partido Demócrata ha subestimado el impacto que podría generar la avanzada edad de Joe Biden y "no ha preparado el terreno con la suficiente anticipación, lo que podría perjudicarles el 5 de noviembre".
"El futuro de la democracia en Estados Unidos está en juego, y el resultado tendrá un gran impacto en la política internacional", declara Jason Xidias. El experto explica que "Europa está en el ojo del huracán" porque el futuro de la OTAN y la guerra en Ucrania dependen de lo que ocurra el 5 de noviembre. "Independientemente de quién gane, es esencial que el perdedor respete el Estado de Derecho, entregue el poder de forma pacífica, que la sociedad en general acepte el resultado y que si hay alguna apelación judicial, esté basada en reclamaciones reales, no meramente en negacionismo político", agrega.
El cambio de giro en las elecciones con la candidatura de Harris
Frente a Joe Biden, Donald Trump iba por delante en los sondeos. La avanzada edad del actual presidente estadounidense, sus fallos de memoria y el fatídico primer debate electoral en junio, entre otras cosas, hicieron que sus votantes y donantes fueran perdiendo confianza en él.
"Biden tuvo un desempeño muy pobre en el debate, lo que evidenció su edad y algunas de sus limitaciones", dice Jason Xidias. "En 2020, Biden tuvo un buen rendimiento en los debates, por lo que mucha gente se quedó con esa imagen, que ya no refleja la realidad", añade el experto.
En esta línea, "aunque Trump tiene 78 años, no aparenta su edad, y por eso sus votantes no se están enfocando en ese aspecto", apunta el experto en política internacional. Xidias sugiere "la posibilidad de establecer una edad de jubilación obligatoria para candidatos presidenciales y quizá un examen de capacidad física y mental antes de presentarse y durante el mandato".
Apoya TU periodismo independiente y crítico
Ayúdanos a contribuir a la Defensa del Estado de Derecho Haz tu aportación