Internacional

Elecciones en Italia: la derecha se impone de forma clara con la 'ultra' Meloni al frente, según los sondeos

Los sondeos a pie de urna otorgan a la líder de Hermanos de Italia entre el 22 y el 26 por ciento de los votos, que sumados a los de La Liga de Salvini y los de Fuerza Italia de Berlusconi darían al bloque de derecha una mayoría suficiente para gobernar

La coalición de la derecha italiana, con la formación Hermanos de Italia de la ultraderechista Giorgia Meloni al frente, se han impuesto de forma clara en las elecciones legislativas de este domingo, según los primeros sondeos a pie de urna, como el realizado por RAI. La cadena de televisión italiana otorga al bloque de derecha entre el 41 y el 45 por ciento de los apoyos, logrando una holgada distancia con el conjunto de los partidos de izquierda, que lograrían entre el 25,5 y el 29,5 por ciento del sufragio. Si se confirman estas estimaciones, Meloni tendría todo a su favor para convertirse en la primera ministra italiana, un puesto que, hasta ahora, nunca ha ejercido una mujer.

Estos sondeos llegan después de una larguísima jornada electoral de 16 horas, con los colegios recibiendo votantes desde las 7 horas de la mañana hasta las 23 horas, momento oficial del cierre de las urnas. Inmediatamente después, ha comenzado el recuento de las papeletas, aunque se espera que los resultados definitivos no se conozcan hasta el lunes. Estos comicios representan el final de la etapa como primer ministro del tecnócrata Mario Draghi, que había dejado claro que no quería seguir en el poder pese a ser la solución de consenso que el presidente Mattarella encontró en 2021.

En concreto, según la cadena RAI, Hermanos de Italia se alzaría con la victoria al cosechar entre el 22 y el 26 por ciento del voto. La Liga, el partido que lidera el polémico exministro Matteo Salvini, conseguiría entre el 8,5 y el 12,5 por ciento, mientras que Fuerza Italia, de Silvio Berlusconi, se haría con entre el 6 y el 8 por ciento de las papeletas. En estos tres resultados está una de las claves. Meloni sumaría más apoyos que sus dos principales juntos, un requisito que la permitiría erigirse como clara candidata a primer ministro sin que nadie lo cuestionase.

Partido Democrático lideraría el centro izquierda tras hacerse con entre el 17 y el 21 por ciento de los sufragios. Le siguen el Movimiento 5 Estrellas (13,5-17,5 por ciento) y el Tercer Polo (6,5-8,5 por ciento).

Como ya se esperaba, estas elecciones se han caracterizado por su baja movilización. A las 19 horas, en concreto, la participación rondaba el 50%, cerca de ocho puntos menos que en 2018 a la misma hora. A las 23 horas, ha sido del 64,13 por ciento, mientras que hace cuatro años fue del 69,36 por ciento.

Dominio en el Congreso y en el Senado

En total, la posible coalición de derechas -Hermanos de Italia, Liga, Fuerza Italia y Nosotros Moderados- obtendría una mayoría clara en el Congreso de los Diputados: entre 227 y 257 de los 400 escaños. El centro-izquierda, conformado por Partido Democrático, Alianza Verde y de Izquierda y + Europa, acapararía entre 78 y 98 asientos. Por su parte, el Movimiento Cinco Estrellas de Guiseppe Conte obtendría entre 36 y 56 escaños y el Tercer Polo (Acción e Italia Viva) del centrista Carlo Calenda, entre 15 y 25 escaños.

El dominio del bloque de la derecha también se reflejaría en el Senado. Ahí, conseguirían entre 111 y 131 de los 200 asientos. El centro izquierda se quedaría muy por debajo: 33-53 señorías. Le seguiría el Movimiento Cinco Estrellas (14-34) y el Tercer Polo (4-12)

Unas elecciones marcadas por la baja participación y la espera a Meloni

Giorgia Meloni se ha hecho esperar. Según decía, tenía previsto votar por la mañana, como la mayoría de candidatos, pero finalmente ha decidido hacerlo a las 22.30, en su colegio electoral de Roma, acaparando toda la atención mediática y a pocos minutos del cierre de los colegios. Su retraso, según ha defendido, se debía a que quería evitar la aglomeración de reporteros y fotoperiodistas. Pero a última hora de la noche, la estampa en su colegio electoral era precisamente esa: una enorme expectación de los medios para fotografiarla ejerciendo su derecho a voto.

Sí que han votado por la mañana el secretario general del progresista Partido Demócrata, Enrico Letta; el líder del populista M5S, Guiseppe Conte, y el centrista Carlo Calenda, al frente de Acción, una formación que ha acudido a los comicios aliada con la Italia Viva de Matteo Renzi. En Milán lo han hecho Salvini y Silvio Berlusconi.

Como ya se esperaba, estas elecciones se han caracterizado por su baja movilización. A las 19 horas, en concreto, la participación rondaba el 50%, cerca de ocho puntos menos que en 2018 a la misma hora. A las 23 horas, ha sido del 64,13 por ciento, mientras que hace cuatro años fue del 69,36 por ciento.

La polémica Meloni, de no tener peso a canalizar el descontento social

Meloni partía como favorita en los sondeos con su formación Hermanos de Italia, un partido que surgió como escisión del centro-derecha de Silvio Berlusconi. En poco más de diez años, ha pasado de no tener peso político a ser uno de los grandes actores de la política italiana, dentro del espectro ultraconservador y nacionalista.

Pese a que su ideología siempre ha sido controvertida, en los últimos años ha relajado su discurso y ha conseguido canalizar el descontento social, relegando a un segundo plano a los partidos tradicionales. Meloni siempre ha defendido ideas antieuropeístas, pero dejó de plantear la salida del euro. Sí que se mantiene fiel a sus mensajes contra la inmigración o en favor de la familia tradicional. Cuando se habla de su figura, a menudo se recuerda que en su juventud llegó a describir a Benito Mussolini como "un buen político". Respecto a su propuesta económica, la política ultraderechista plantea una rebaja de impuestos.

Pese a que su ideología siempre ha sido controvertida, en los últimos años ha relajado su discurso y ha conseguido canalizar el descontento social, relegando a un segundo plano a los partidos tradicionales

Mientras que Salvini pelea por entrar de nuevo en el Gobierno -como ya consiguió junto con el Movimiento 5 Estrellas (M5S)- , Berlusconi representa a la derecha más moderada del país con su partido Forza Italia. A pesar de sus casi 86 años, se mantiene aparentemente inmune a los múltiples escándalos que le han rodeado en los últimos tiempos.

El 'ránking' electoral que surge tras el cierre de los colegios electorales no tiene por qué significar un pacto automático de derechas para formar gobierno. Una vez repartidos todos los escaños corresponderá a Mattarella abrir a mediados de octubre una ronda de contactos.

La retirada de los apoyos necesarios al Gobierno de Draghi ha obligado a adelantar a las elecciones a este domingo. La Constitución establece que la renovación de las cámaras debe realizarse cada cinco años. Los últimos comicios se celebraron en 2018.

Apoya TU periodismo independiente y crítico

Ayúdanos a contribuir a la Defensa del Estado de Derecho Haz tu aportación
Salir de ver en versión AMP