Documentos clasificados del Pentágono filtrados en redes sociales muestran cuánto Estados Unidos ha penetrado en la Inteligencia rusa y su capacidad para advertir a Ucrania sobre los planes de Moscú y sobre la fuerza de su maquinaria de guerra, según reveló recientemente The New York Times. Los documentos, de fines de febrero y principios de marzo, pero encontrados en redes sociales en los últimos días, hablan sobre un Ejército ruso agotado en la guerra que libra hace un año contra Kiev y de un aparato militar que está profundamente comprometido. Pero esos documentos también muestran que EEUU parece estar espiando a los principales militares y políticos ucranianos, para tener una visión clara de las estrategias de lucha de ese país. Los documentos contenían tablas de futuras entregas de armas, datos sobre las fortalezas de tropas y batallones, al igual que planes militares. Además, los documentos secretos filtrados del Pentágono también apuntan a que Washington podría haber espiado a algunos de sus socios, como Corea del Sur e Israel. Por ello, el país ha estado en contacto en los últimos días con algunos de sus aliados más cercanos para tranquilizarles.
En una rueda de prensa, John Kirby, uno de los portavoces de la Casa Blanca, explicó que altos cargos de EEUU han estado en contacto con algunos de los aliados más cercanos de Washington "a los más altos niveles" durante los últimos días para hablar sobre las recientes filtraciones. Además, aseguró que el Gobierno de Joe Biden está haciendo todo lo posible para identificar la fuente de filtración, pero todavía no ha podido hacerlo. "No sabemos quién está detrás de esto, no sabemos cuál es el motivo o que más puede haber ahí fuera", reconoció.
A petición del Pentágono, el Departamento de Justicia ha abierto una investigación de carácter criminal para determinar la fuente de la filtración de esos documentos, que aparecieron en los últimos días en redes sociales como Discord y Twitter y de los que se hicieron eco medios estadounidenses.
John Kirby afirmó, no obstante, que algunos de los documentos, marcados como "secretos", han sido manipulados, por lo que pidió a los medios que tengan cuidado a la hora de informar sobre ellos.
Asimismo, uno de los portavoces del Pentágono, Chris Meagher, afirmó que la filtración presenta "un serio riesgo" para la seguridad nacional de EEUU y puede potencialmente alimentar campañas de desinformación, ya que algunos han sido manipulados.
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