La Generalitat da un paso más en su objetivo de desconectar las funciones de Govern de las del Estado español. La consejera de Exteriores de la Generalitat, Meritxell Serret ha anunciado este martes la aprobación de la creación de "cuerpo diplomático catalán", un cuerpo de funcionarios encargados de la relación de Cataluña con el exterior.
La intención -según ha detallado la consejera- es "retener y captar" talento y "garantizar que seguimos haciendo todavía más y mejor el trabajo de llevar Cataluña al mundo". Serret no ha querido detallar cuantos funcionarios trabajarían en el programa, que nace con el claro objetivo de potenciar Cataluña como un gobierno autónomo.
Rafael Arenas, catedrático de Derecho Internacional Privado y vicepresidente de Impulso Ciudadano, ha destapado la inviabilidad de la medida, que atentaría directamente contra el Artículo 149. 1 de la Constitución. Según recoge la Carta Magna, El Estado tiene la competencia exclusiva sobre varias materias, entre ellas, las Relaciones Internacionales.
Los detalles de la propuesta serían incompatibles con lo recogido en la Constitución, ya que -tal y como explica el catedrático en su cuenta de la red social X- "estos profesionales se encargarían de establecer y mantener las relaciones con gobiernos y sus representantes en el exterior, instituciones de la Unión Europea, organismos internacionales y redes de cooperación territorial", labor adjudicada "en exclusiva" al Estado.
Serret ha comentado en rueda de prensa que el impulso de este "cuerpo diplomático" es una "necesidad" para este Govern que quiere seguir difundiendo su propaganda.
Los nacionalistas catalanes han acelerado la maquinaria independentista. La Generalitat parece trabajar por libre con la creación de entes públicos propios para vender su imagen en el exterior, así como, las negociaciones establecidas por Junts y ERC con el Ejecutivo central. El primer paso será aupar a Sánchez hasta la Moncloa a cambio de la amnistía y el objetivo final un referéndum de autodeterminación. Así lo han manifestado los líderes catalanes, Peré Aragonés desde un cargo público y Puigdemont desde el exilio.
El expresidente catalán hizo un discurso el pasado 1 de octubre en el hizo un llamamiento a repetir la "fórmula" que hizo posible el 1-O. Una estrategia dirigida en 2017 desde el Govern que llevó a los líderes del 'procés' a ser condenados. Seis años después, los nacionalistas catalanes buscan enfrentarse la Justicia y eludir sus condenas mediante una amnistía facilitada por Sánchez a cambio de su investidura.
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