La guerra de Ucrania ha sacado la mejor y la peor parte del ser humano, pero también la más lasciva. La invasión rusa no solo ha despertado interés informativo, sino también el pornográfico. Según Google Trends, el interés en este tipo de contenido 'made in Ukraine' se ha disparado desde el inicio de la guerra: las gráficas muestran cómo este tipo de vídeos habían tenido un interés bajo hasta hace semana y media.
El propio Google Trends interpreta que ese interés se disparará aún más durante la siguiente. Algunos términos de búsqueda relacionados con contenido pornográfico han cuadriplicado su tráfico durante esta semana y media de conflicto, aunque es el término principal, 'ukrainian porn', el que más se ha disparado: las búsquedas han crecido un 2.750% en apenas 10 días.
Con Rusia, vemos una gráfica muy interesante. Cuando estalló la guerra, los contenidos de dos rombos procedentes de Rusia se multiplicaron, así como sucedió con Ucrania. Su crecimiento se mantuvo hasta alcanzar, el 27 y 28 de febrero, su pico de interés. Desde entonces, el consumo de este tipo de contenidos se ha reducido de forma paulatina en todo el mundo.
Pese a que el consumo de contenido pornográfico ruso está decreciendo y el interés baja en picado, las búsquedas de vídeos e imágenes 'subidas de tono' se mantiene por encima de la media desde que el conflicto en Ucrania comenzase.
Es curioso que donde menos interés general se muestra por el contenido erótico ruso es en países de la Unión Europea, cuyos ciudadanos han rebajado sus búsquedas por este tipo de contenidos respecto a antes del inicio de la guerra. En países asiáticos como Nepal o Mongolia, zonas más neutrales o afines a Rusia -en Georgia también hay un interés alto-, las búsquedas son mayores que en otras zonas del mundo.
Todo esto mientras muchas empresas han decidido dejar de operar de forma total o parcial en Rusia, incluidas algunas como Onlyfans, que ha bloqueado a algunos creadores de contenido -según ellos mismos han reportado- procedentes del país invasor a modo de protesta por lo que está sucediendo en territorio ucraniano.
Las desgracias afectan a la visualización de contenidos pornográficos
Los sucesos como guerras o los fallecimientos afectan al consumo de pornografía a nivel global. Solo hay que observar dos momentos concretos: las muertes de las actrices Shyla Stilez y de August Ames en 2017. La popularidad de ellas dos -y por tanto, el consumo de su contenido- se disparó el día de su muerte y días después, volvió a reducirse a cifras normales.
Se podrían pensar que estas búsquedas en Google tendría que ver las noticias relacionadas con su muerte, pero nada más lejos de la realidad: el interés por ellas se alargó durante más de un mes para luego iniciar una tendencia a la baja que se mantiene a día de hoy.