"Bajo los adoquines, está la playa". Este era uno de los más célebres lemas de mayo del 68, que a punto estuvo de costar la presidencia al mismísimo Charles de Gaulle. Casi cinco décadas después de aquello, Francia asiste al nacimiento de un nuevo movimiento de ciudadanos descontentos que se asemeja mucho al 15-M español. Todo comenzaba el pasado jueves 31 de marzo cuando un grupo de jóvenes decidía concentrase en la parisina plaza de la República bajo el lema #nuitdebout, al término de la gran manifestación contra la reforma laboral de Hollande. La policía desalojó la plaza, lo que lejos de disuadirles, provocó un efecto llamada. Este sábado serán ya diez noches consecutivas a la intemperie.
La 'ley El Khomri' -en alusión al apellido de la ministra de Trabajo que la impulsa- ha sido sólo la gota que ha colmado el vaso de la escalada de la protesta social en Francia. Las centrales sindicales de estudiantes y trabajadores han celebrado este sábado una segunda gran movilización y los participantes estaban llamados a concentrarse después en la plaza de la República, -tomada como epicentro de las protestas al estilo de la madrileña Puerta del Sol-. Las autoridades señalan que 120.000 personas se han manifestado en unas 200 ciudades en todo el país, frente a las casi 400.000 que lo hicieron el pasado día 31. La jornada de protesta ha estado nuevamente marcada por los altercados provocados por algunos manifestantes violentos, en particular en París y en Rennes.
Cada día se celebra una gran asamblea ciudadana a las 18.00h, por la que se asoman personajes relevantes de la cultura y la economía
"Este movimiento no nació y no morirá en París. De la primavera árabe al 15-M, de la plaza de Tahrir al parque de Gezi, la plaza de la República y los todos los demás lugares ocupados en Francia son el reflejo de la mismas iras, las mismas esperanzas y la misma convicción: la necesidad de una sociedad nueva en la que democracia, dignidad y libertad no sean declaraciones vacías", anuncian en un comunicado desde el colectivo Convergence de Luttes (Convergencia de Luchas), creado tras la primera reunión del movimiento.
Las asambleas y los debates callejeros se asemejan al espíritu que inundaba las plazas y calles españolas en 2011. Cada día se celebra una gran asamblea ciudadana a las 18.00h, por la que se asoman personajes relevantes de la cultura o la economía. También algunos políticos de izquierdas, que acuden a título particular, pues el movimiento se declara apolítico y transversal. Además, los ciudadanos que se concentran en las plazas se organizan mediante comisiones al estilo del sistema que se usó en las acampadas de nuestro país. También existe un cantina donde se sirve comida y se han puesto en marcha tanto una radio que se puede seguir en directo por internet, como un canal de televisión.
El movimiento se extiende por Francia y Europa
Pero las protestas no se limitan a la capital ni mucho menos, sino que se están extendiendo por otras ciudades de la geografía gala, como Lille, Toulouse, Nantes, Rennes y Estrasburgo. "Los debates que dan vida a las asambleas de la plaza de la República demuestran que el hartazgo manifiesto va mucho más allá de la reforma laboral y se extiende hacia una problemática más global: el replanteamiento de un sistema social y político en crisis y sin aliento", indican desde el mismo colectivo.
El movimiento de protesta traspasa también las fronteras de Francia y ya están teniendo lugar concentraciones de apoyo en capitales como Lisboa, Madrid o Berlín. Este mismo fin de semana estaban convocadas varias movilizaciones en España, como en la madrileña Puerta del Sol, en la Plaza de Cataluña (Barcelona), así como en Zaragoza, Murcia, Tarragona o Salamanca. Por otra parte, muchos españoles que vivieron el 15-M en las plazas y que tuvieron que emigrar a París por la falta de oportunidades, aportan ahora sus experiencias a los integrantes del movimiento.
También políticos como el eurodiputado de Podemos Miguel Urbán han estado durante estos días en la plaza de la República. Decía esto en su cuenta de Twitter: "Desde París, ocupando las plazas, por la #PrimaveraEuropea y una #RebelionDemocrática #NuitDebout". También están presentes integrantes de la Marea Granate, el colectivo de emigrantes españoles nacido al calor de otros movimientos sociales aparecidos en España en los últimos años.
El Gobierno galo hace algunas cesiones
A raíz de las protestas y las movilizaciones, el Gobierno francés parece que está tratando de hacer algunas concesiones durante el trámite parlamentario del proyecto de ley. El Ejecutivo está aceptando algunas de las 1.000 enmiendas presentadas a un texto con 52 artículos. Tienen que ver particularmente con las condiciones económicas en las que una empresa puede despedir a sus empleados con indemnizaciones reducidas. Los sindicatos piden la retirada de la reforma y muestran su oposición a que los acuerdos que se alcancen en las empresas primen sobre los convenios colectivos nacionales.
La patronal y el Gobierno francés aseguran que la medida puede beneficiar la adaptación de las compañías a los diferentes ciclos económicos. Pero una de las mayores preocupaciones del Gobierno es que sean precisamente los jóvenes los que encabecen las protestas. En los últimos treinta años ha habido tres grandes movilizaciones lideradas por ellos, que terminaron obligando a dar marcha atrás en las reformas tanto a gobiernos de izquierdas como de derechas. El primer ministro francés, Manuel Valls va a recibir a los representantes estudiantiles el Ejecutivo galo se plantea hacer anuncios en favor de los jóvenes, como la creación de un subsidio para los menores de 25 años en busca de trabajo. Y es que Hollande hizo de los jóvenes su principal prioridad en la campaña de 2012. ¿Qué futuro le espera cuando apenas queda un año para las próximas presidenciales?
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