Las autoridades de Rusia han solicitado al Gobierno de Eslovaquia que devuelva las dosis que ha recibido de la vacuna Sputnik V contra la covid-19, por considerar que se han cometido "violaciones del contrato" después de que el regulador eslovaco dijese que carecía de los datos suficientes para avalar su eficacia.
Eslovaquia recibió el 1 de marzo un primer envío de 200.000 dosis, pero no ha inyectado ninguna de ellas a la espera de autorizaciones que no llegan. La Agencia Europea del Medicamento (EMA) no se ha pronunciado, mientras que a nivel interno los expertos alegan que no pueden emitir una resolución clara sobre la seguridad del fármaco.
En un informe, el organismo regulador eslovaco arguyó que el material suministrado no era idéntico al descrito en la revista médica 'The Lancet', que confirmó una eficacia del 91,6% para la Sputnik V.
"Campaña de desinformación"
El Fondo Ruso de Inversión Directa ha solicitado formalmente a Eslovaquia que devuelva el lote "para que se pueda utilizar en otros países". Así figura en una carta remitida el 6 de abril y en la que se alegan "múltiples violaciones del contrato", según la cuenta oficial en Twitter de Sputnik V.
En este sentido, considera incluso que hubo un "acto de sabotaje" por parte del regulador eslovaco, al que acusa de lanzar una "campaña de desinformación", con "noticias falsas" como la referente a las supuestas diferencias en el producto enviado con respecto al analizado en 'The Lancet'.
"Todos los lotes de Sputnik V tienen la misma calidad y pasan un exhaustivo control de calidad en el Instituto Gamaleya. La calidad de Sputnik V ha sido confirmada por reguladores de 59 países", señala la cuenta.
Las autoridades rusas esperan que Eslovaquia "resuelva sus diferencias internas" y tenga en cuenta que "las vacunas deberían salvar vidas, no ser utilizadas en geopolítica y luchas internas".