La ministra de Defensa alemana, Ursula von der Leyen, una convencida europeísta, ha pasado de ser considerada tiempo atrás como potencial sucesora de la canciller Angela Merkel a convertirse en la primera mujer que será presidenta de la Comisión Europea (CE).
De 60 años, primera mujer ministra de Defensa en Alemania, forma parte desde hace tiempo de una organización suprapartidista que quiere una mayor integración de la Unión Europea (UE), con la meta de llegar a un federalismo europeo.
Von der Leyen, hija del político cristianodemócrata Ernst Albrech que fue jefe del gobierno regional de Baja Sajonia, nació en Bruselas en 1958 y vivó en Bélgica hasta 1971.
Su carrera política se inició en Baja Sajonia, donde fue ministra regional de ese "land" antes de dar el salto a la escena nacional en la campaña electoral de 2005 como parte del equipo de Angela Merkel.
Durante el primer Gobierno de Merkel (2005-2009) Von der Leyen, que tiene siete hijos, fue ministra de Familia, departamento desde el que generó una pequeña revolución al impulsar decisivamente las posibilidades de que las mujeres compaginen la actividad profesional con la vida familiar.
Aplaudida por los socialdemócratas y los Verdes, causó con ello irritación dentro de ciertos sectores cristianodemócratas que seguían cultivando la idea de que la mujer con hijos debe quedarse en casa mientras estos crecen, en lugar de regresar lo más rápidamente posible al trabajo.
"Madre de la nación alemana"
Ursula Von der Leyen -que en esos años se ganó el apodo de "madre de la nación alemana"- tiene una biografía que parece hecha a la medida para mostrar que el hogar y el trabajo no son incompatibles.
Antes de entrar en la política activa, Von der Leyen había trabajado como médico tras terminar su carrera de medicina en 1987, a la que había llegado después de haber realizado estudios de arqueología y economía.
Todo ello no le impidió formar una familia con siete hijos y las 12e horas de trabajo que todos le atribuyen no le impide aparecer siempre como si acabase de salir de una sesión de hidroterapia.
De la cartera de Trabajo Von der Leyen pasó a la de Trabajo y Asuntos Sociales en 2009 y luego, en 2013, se convirtió en la primera mujer en ser ministra de Defensa en Alemania.
Antes su nombre se había barajado como candidata a la presidencia de Alemania y también se le habían atribuido ambiciones de asumir un cargo en la Comisión Europea, ante lo que se había encontrado con la oposición de Merkel que quería mantenerla en su equipo de Gobierno.
En las dos primera legislaturas de la era Merkel, Von der Leyen fue considerada como la ministra estrella del Gobierno e incluso muchos la mencionaban como posible sucesora de su mentora en la Cancillería.
Sin embargo, siempre rechazó al título de "delfín de Merkel", asegurando que cada generación tenía su canciller y que ella y Merkel pertenecían a la misma generación.
La idea de que Ursula Von der Leyen podía algún día convertirse en canciller perdió fuerza con el desgaste a que se ha visto sometida como ministra de Defensa en Alemania.
En octubre del año pasado admitió "errores" en la contratación de asesores externos por su departamento, cuestión que desató críticas de la oposición e investigaciones preliminares por parte de la Fiscalía.
Además del alemán y del francés, la futura presidenta de la Comisión Europea domina el inglés, idioma que ha usado para sus discursos en foros internacionales de seguridad.