Salió al mercado en 2012 y, un año después, el DS5 Hybrid ya ha recibido pequeñas mejoras en busca sobre todo de minimizar aún más sus consumos. Ajustes que han permitido a este primer híbrido de Citroën homologar un consumo mixto de apenas 3,4 l/100 km, casi medio litro menos, siendo por ello el DS5 con menores consumos, al menos oficialmente. Su precio, supone unos 6.000 euros más que la versión Diesel Automática de 160 CV o que el DS5 de gasolina con la misma potencia, 200 CV, pero cambio manual. Es, por tanto, una versión no precisamente barata, pero la tecnología que esconde en sus entrañas tiene ese plus de distinción que a muchos no les importará asumir.
Un precio que también se justifica en un diseño exterior de gran personalidad estética y en un interior de acabados desconocidos en un Citroën hasta la llegada de esta gama DS, por calidad y, sobre todo, diseño. Entrar en él supone hacerlo en un turismo sin duda diferente, cautivador por la multitud de mandos que encontramos en todo el salpicadero, en la consola central y hasta en el techo.
Con todo, esta versión pasa por ser el primer modelo de la marca con propulsión híbrida, con un motor eléctrico -2 en este caso, uno en cada eje- y otro Diesel en lugar de gasolina, una combinación poco extendida a día de hoy que está todavía por desarrollar y de la que presume ya el fabricante francés. Frente a las muchas berlinas híbridas del mercado, el DS5 se desmarca no sólo por ello, sino también por su sistema de tracción 4x4, por cuanto el motor eléctrico trasero actúa en el propio eje aportando motricidad.
Por dentro, mantiene similar diseño en el salpicadero del resto de la gama, con mínimas variaciones en la información del cuadro de mandos, que contempla el flujo de energía entre ambos motores, y a la consola central, que adopta además de la palanca del cambio automático un mando específico para elegir el modo de funcionamiento del sistema híbrido, que cuenta con 4 opciones diferentes.
Como ya hemos dicho, lo que no es el DS5 Hybrid4 es precisamente barato, casi 6.000 euros por encima del HDi de 163 CV, pero a cambio ofrece ante todo disfrutar de una tecnología de lo más avanzada, permitiendo que nos podamos mover esporádicamente en ciudad en completo silencio y, en general, con unos consumos realmente ajustados. Porque en carretera, el motor eléctrico contribuye a reforzar la respuesta del motor Diesel más que a minimizar el consumo, aunque conduciendo de la forma adecuada, sin buscar grandes aceleraciones, sí podemos llegar a lograr valores inferiores, pero no mucho, a los del DS5 HDi de 163 CV.
En carretera, ofrece cuatro posibilidades de funcionamiento, AUTO, SPORT, 4WD y ZEV. La primera es, por defecto, la que se activa al pulsar el botón de arranque y en ella predomina la acción del motor Diesel que se ve ayudado en los primeros instantes por el eléctrico, un aporte de potencia que permite salir desde parado con algo más de energía, aunque los cerca de 200 kilos extras de peso se dejan sentir. En carretera, mejor el modo SPORT que, una vez activado -se puede hacer en marcha-, se aprecia una respuesta al acelerador instantánea. Recupera el ritmo y supera las pendientes del trazado con notable facilidad, aunque el consumo de batería es mucho mayor que en AUTO y, en caso de una utilización muy intensiva, acaba por dejar de actuar. Es, por tanto, un modo de funcionamiento que conviene activarlo puntualmente, cuando necesitemos una respuesta extra para realizar adelantamientos o no perder el ritmo de marcha al llegar a una pendiente muy pronunciada. Además, el cambio automático tiene menos pérdidas ayudado por el motor eléctrico y logra inserciones de marcha más rápidas, sin saltos apreciables que hacen la conducción más agradable.
El modo ZEV permite movernos sólo con el motor eléctrico, aunque lógicamente queda reservado para cortos desplazamientos urbanos o para realizar en pleno silencio maniobras de aparcamiento. En las condiciones más favorables, ofrece una autonomía de unos 4 kilómetros, aunque a poco que no esté plenamente cargada, entre en funcionamiento el motor térmico cambiando a moto AUTO por sí solo. Cada vez que frenamos y reducimos velocidad la batería va recuperando carga y, si practicamos una conducción suave y aprovechamos la fuerza del motor eléctrico para iniciar los primeros metros en cada arrancada, podemos llegar a lograr unos consumos realmente bajos, en torno a los 5 l/100 km, cifra realmente interesante para un turismo del peso, dimensiones y potencia del DS5 Hybrid4.
Otra cosa es en carretera, donde sólo si conducimos con mucho tacto en el pedal del acelerador podremos lograr buenos resultados, aunque en ningún caso claramente por debajo de las del DS5 HDi de 163 CV. A ritmos entre 130 y 140 km/h de marcador, sin abusar mucho del acelerador, se sitúan ligeramente por encima de los 6,5 litros. Lo que no hay duda, es que a la hora de hacer kilómetros resulta tremendamente eficiente, manteniendo cruceros elevados con notable sencillez y con cifras de consumos cuando menos moderadas. Lo hace, además, desde un altísimo confort fruto de una contenida rumorosidad mecánica y de un bastidor bien elaborado.
Con algo más de peso extra respecto al DS5 HDi, el Hybrid4 pierde algo en agilidad y eficacia en curva, pero apenas se resiente en una pisada que mantiene la solidez que caracteriza a cualquier otra versión de la gama. No se mueve con especial eficacia en tramos muy virados, pero en las carreteras habituales, de trazados más bien amplios y curvas de velocidad ya elevada, mantiene la trazada con mucha precisión y siempre con altas dosis de confianza al volante.
DATOS COMERCIALES:
Versión: DS5 Hybrid4 Style
Precio: 36.140 euros
Garantía: 2 años o 100.000 kilómetros
Revisiones: cada 20.000 kilómetros
DATOS TÉCNICOS
Motor combustión: 4 cilindros en línea
Cilindrada: 1.997 cm3
Potencia máx.: 163 CV a 3.850 rpm
Par máximo: 300 Nm a 1.750 rpm
Motor eléctrico: 37 CV / 200 Nm
Tracción: Total conectable
Caja de cambios: Automática de 6 velocidades
Vel. máxima: 211 km/h
Acel. 0 a 100 km/h.: 8,6 seg
Dimensiones: 4,53 / 1,85 / 1,51 m
Capacidad de maletero: 325 litros
Depósito de combustible: 60 litros
Consumo medio en recorrido de pruebas: 6,6 l/100 km
Autonomía máxima: 909 km
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