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Audi celebra los veinte años de su primera carrocería de aluminio

Audi revolucionó la construcción de automóviles hace dos décadas con su primera carrocería de aluminio `Space Frame´, estrenada en su modelo más representativo entonces, el A8, llevando así a la producción sistemas de construcción reservados hasta la fecha a exclusivos modelos de competición.

Del Audi Space Frame al Audi ultra, dos expresiones que forman parte de la filosofía de la marca en cuanto a sistemas de construcción ligera se refiere, veinte años entre una y otra con un mismo  fin, lograr turismos eficientes mediante la máxima ligereza posible. En 1993, con el lanzamiento del A8 logró poner en el mercado una gran berlina de lujo con el peso de una berlina de categoría inferior.

En el nuevo A8, la tecnología ASF de la marca permite un ahorro de peso de un 40 por ciento

Dos décadas después, con un peso de apenas 231 kg, la carrocería ASF de la nueva generación del Audi A8 supone una reducción de peso de alrededor del 40 por ciento respecto a una carrocería realizada en acero convencional, utilizando 13 calidades diferentes de aluminio.

Desde el primer Audi A8, la investigación y el desarrollo de la marca en cuanto a construcción ligera han sido constantes, lo que ha permitido ir reduciendo progresivamente los costes de fabricación con materiales de bajo peso y gran resistencia. Como consecuencia de ello se ha conseguido popularizar la tecnología y, así, el concepto Audi Space Frame se ha extendido a otros modelos de segmentos inferiores a lo largo de las dos últimas décadas. En el año 2000 surgió el Audi A2, un coche que se adelantó a su tiempo y que gozó de un enorme prestigio entre sus propietario, aunque  un precio elevado en relación a sus alternativas más convencionales hizo que su éxito comercial no alcanzara las previsiones iniciales.

Los siguientes modelos en adoptar carrocerías de aluminio fueron el Audi TT, en 2006, y el exclusivo  R8 dos años después. 20 años de desarrollo en los que Audi ha fabricado más de 750.000 coches bajo los principios de construcción ASF. Una preocupación de la marca por la  reducción de peso que no está sólo relacionado con la eficiencia, sino también con la seguridad. Menos inercias, mayor facilidad de conducción que, junto a unos consumos y emisiones de CO2 menores, justifican el esfuerzo de la marca en el desarrollo de esta compleja tecnología.

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