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‘Quiero ser’, programa de Sara Carbonero sin Sara Carbonero

El gancho de utilizar a Sara Carbonero como imagen para dar visibilidad al programa fue bonito… mientras duró. 

Telecinco no acierta. Ya les pasó con el regreso de 'Hable con ellas' y ahora les sucede con ‘Quiero ser’, que ha resultado ser lo que no parecía. Su escasa audiencia (9,9%) confirma un mal presagio. Un popurrí de sin razones que nada tiene que ver con lecciones de moda ni de estilo y mucho menos con un resultado final de convertir en influencers a los participantes que nada saben y nada aprenden.

Te contamos los 10 errores del programa:

1. LA AUSENCIA DE SARA CARBONERO: La gran expectación de la vuelta a las pantallas de la presentadora había creado mucho revuelo mediático para que Sara entrara por la puerta grande. No solo no entró, si no que brilló por su ausencia. Su aportación se limitó a decir cuatro frases guionizadas. ‘Gracias Sara’ por tu colaboración, pero sin ella se habría podido estrenar el programa.

2. COACHING SIN FUNDAMENTO: Para dar lecciones primero tienes que tenerlas aprendidas. Los tres 'cocahes' Dulceida, Madame de Rosa y Cristo Báñez, que van a dirigir a los participantes, no mostraron ni en una sola ocasión su profesionalidad en la materia, salvo para utilizar tecnicismos que ellos crean y reproducen sin ton ni son, como el incansable “It girl”, pero que nada significa en el lenguaje del resto de los mortales.

3. EL CASTING: Los participantes con iniciativa cero no han ayudado a que el programa "enganche a la audiencia", ya que están muy lejos de poder dedicarse profesionalmente al mundo de la moda y mucho menos, de trasladar sus conocimientos a otros. Que te guste ir de tiendas, vestir con lo primero que pillas y no tener complejos para decorar tu cuerpo como si de un árbol de navidad se tratara… ¡no es saber de moda!

4. CERO CONSEJOS DE MODA: Se supone que la razón de ser del programa es enseñar a los participantes sobre moda y estilo, pero no se escuchó ni una sola lección al respecto. Maquillarse unos a otros (sin explicar cómo), o valorar como visten entre sí, no ayuda a aprender hacerlo.

5. DAR ALAS A LAS TONTERÍAS: Está muy bien que la tendencia sea motivar a todo hijo de vecino a que se quieran y sean uno mismo, con sus peculiaridades. Pero de ahí a hacer creer que pueden ser lo que quieran hay un trecho largo. Frases del tipo “soy una modelo”, “soy una diva”, “mis padres me dan lo que quiero para que yo sea feliz” o un sinfín de desafortunadas afirmaciones que NO merecen ser apoyadas.

6. PUBLICIDAD ENCUBIERTA: En todos los programas de Telecinco, se promocionan productos, pero en el caso de ‘Quiero ser’ los productos patrocinados aparecen uno detrás de otro. La ruta organizada por 'los coaches' para enseñar rituales de belleza se limitó a visitar los establecimientos que han patrocinado el programa. Al menos, les ayudará a sobrevivir económicamente unos cuantos programas más.

7. INTENTO DE REALIY SHOW: El programa ha intentado crear un reality show grabando el día a día de los participantes, pero nada más lejos de la realidad. No se ve nada de sus vidas que nos haga conocer sus inquietudes o necesidades. El formato se presta a ser un reality que intenta enganchar al espectador. La falta de postproducción de calidad es más que evidente.

 8. PELEAS Y MÁS PELEAS: Si la verdadera razón de los participantes es aprender, formarse y desarrollarse como profesionales, no se entiende que el 90% del programa fuera juzgar, criticar y evaluar a sus compañeros creando una polémica chabacana y vulgar entre ellos. Insultos, humillaciones y peleas fueron la tónica de la noche del martes de Telecinco.

9. BAJO NIVEL DE LOS PARTICIPANTES: Si las personas que están preparadas para dedicarse al mundo de la moda ve posibilidades en estos participantes… ¡tenemos un problema! No es cuestión de estudios, es cuestión de saber estar y comportarse. Un profesional, debe tener unos conocimientos mínimos, un nivel cultura apto y una actitud proactiva. Los participantes no conocían nada del mundo de la moda, ya que hablaban con ellos y parecían no entender nada.

10. POPURRÍ: El programa está mal focalizado. Quieren abarcar mucho, pero al final "la avaricia rompe el saco" y se quedan en tierra de nadie. Ropa, cuidado personal, coaching psicológico, hábitos de alimentación… muchas ideas juntas, sin profundizar en ninguna que dejan mal sabor de boca y que no aportan nada. 

 Mucha suerte, compañeros ! #québuenaluzteníamos #elquehaceelselfiesellevalapeorparte Una foto publicada por Sara Carbonero (@saracarbonero) el19 de Jul de 2016 a la(s) 5:39 PDT

¿Seguirá adelante el programa o será otro fracaso como el retorno de 'Hable con ellas'? 

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