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Canal Sur enfurece a miles de espectadores al cambiar las campanadas por publicidad

La cadena pública, que se declara "consternada" y anuncia una investigación, empezó su retransmisión de la entrada de año por la primera campanada, cortó en la tercera para poner publicidad y no conectó de nuevo hasta la décima. "Va a salir todo en pantalla, no habrá problema", decía el presentador segundos antes de la chapuza.

Canal Sur ha abierto una investigación para aclarar las causas de lo ocurrido la pasada medianoche en la retransmisión de las campanadas de Nochevieja, que cortaron para emitir publicidad. La RTVA ha pedido disculpas en Twitter a los espectadores y ha ordenado la apertura de una investigación para que se aclare lo ocurrido.
 

Las campanadas de Canal Sur Televisión, que fueron retransmitidas desde Almería por la actriz Ana Ruiz y el chef Enrique Sánchez, empezaron por la primera, cortaron en la tercera para poner publicidad y no conectaron de nuevo hasta la décima. "Va a salir todo en pantalla, no habrá problema", tranquilizaba Sánchez a la audiencia justo antes de la entrada de año. Pero a pesar de que los presentadores habían explicado todos los detalles, las campanadas comenzaron sin previo aviso después de un anuncio. A tan sólo un minuto de las doce de la noche, aparecía en la pantalla el reloj y justo después, la careta de Canal Sur y un anuncio de cafés; volvió la imagen del reloj (flanqueada por el logo de una marca de refrescos) justo con la primera campanada, de forma sorpresiva y sin previo aviso.

Y a la tercera campanada la imagen se cambió por un anuncio del Mundial de motociclismo en Jerez, que se interrumpió poco después, la pantalla se quedó en negro y regresaron las campanadas cuando el reloj daba la novena. Esto fue lo que se vio en directo:

Tras concluir y entrar el 2015, los presentadores (que no supieron lo ocurrido hasta más tarde) felicitaban a los espectadores el Año Nuevo, aunque más tarde, cuando se enteraron de lo ocurrido, pidieron disculpas en Twitter.

Miles de espectadores se quedaron, pues, con las ganas de seguir en directo las habituales campanadas y comerse las uvas al compás. Tras el error de la cadena, de forma casi inmediata, varios usuarios se apresuraron a publicar en la red su sentimiento de frustración por no haber podido cumplir con la tradición:

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