El periodista Sergio Gregori ha sido apartado como presentador de Canal Red. Así ha sucedido debido a desavenencias editoriales y laborales con el dueño de este medio de comunicación, Pablo Iglesias, quien ya había decidido reducir la presencia de Gregori en pantalla unos meses atrás.
Así lo han explicado a Vozpópuli fuentes del canal, que inciden en que el presentador –que también ejerce de secretario general del Sindicato de Periodistas de Madrid- ha trasladado en todo este tiempo su intención de realizar un programa más “plural”, aunque eso implicara el alejarse de las tesis que defiende Podemos.
Lo que sucede es que ese propósito personal se ha manifestado en un momento de 'guerra total' entre Sumar y la formación morada, en el que la sensibilidad está a flor de piel y en el que cualquier concesión editorial al 'rival' era sometida a debate en el seno del canal.
Eso llevó a Iglesias a degradar al presentador de 'El Tablero' -así se llama el programa matinal- y a sustituirle por otras colaboradoras durante algunos días de la semana. Entre ellas, Dina Bousselham, quien estuviera al frente de la extinta publicación digital La Última Hora.
Este periódico ha contactado con Gregori, pero ha declinado responder su mensaje y sus llamadas. Sin embargo, hace unas horas ha difundido un vídeo en el que explica que su objetivo al enrolarse en el proyecto de Canal Red fue el de realizar un periodismo que molestara al poder y que ayudara a luchar contra el discurso de los medios de comunicación del establishment.
A su juicio, eso no está garantizado actualmente en el medio de comunicación de Iglesias. "Algunos cofundamos Canal Red creyendo que romper el bloque de poder mediático estaría por encima de la pugna partidista en la irrelevancia de un espacio político marginal. Que nadie se confunda: no tenemos precio. No nos compran ni con un acta de diputado ni con un plató", ha manifestado Gregori este lunes en sus redes sociales.
Conflictos personales
Otras fuentes del canal matizan esta versión. Confirman que han existido diferencias y discusiones entre Gregori e Iglesias, pero ponen el foco sobre los varios actos de indisciplina que han presenciado en los últimos meses por parte del presentador, que han influido en esta decisión.
Este joven periodista fue una de las piezas clave en la puesta en marcha de Canal Red. Entre otras cosas, por su conocimiento del sector audiovisual, en el que gestionó una pequeña empresa de televisión.
Cabe destacar que Iglesias explota esta televisión –y su medio digital- desde hace más de un año. Su posición no es “neutral” –como reconocía este lunes una de sus periodistas-, sino que se corresponde con la de un medio activista con los postulados de la ideología más cercana a Podemos.
Este proyecto echó a andar después de una colecta digital –crowdfunding- en la que Iglesias recaudó más de 400.000 euros. A partir de ahí, abrió la posibilidad de que sus seguidores pagaran una suscripción mensual al canal.
Los participantes en el proyecto negaron que Jaume Roures estuviera involucrada en el mismo. Sin embargo, la sociedad desde la que presta actividad -Melancolic Films S.L.- fue fundada por el magnate barcelonés y por su hija, Teia. Desde mayo de 2023, está presidida por Pablo Iglesias, tal y como ha podido comprobar este medio en el Registro Mercantil.
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