La polémica final del festival de Eurovisión obtuvo en España una audiencia del 41,8%, dos puntos más que el año pasado. Casi cinco millones de espectadores siguieron el evento, 47.000 más que en 2022, pese a los numerosos llamamientos al boicot por la participación de Israel en plena ofensiva contra Gaza.
La consultora Barlovento ha informado este domingo de que la final de Eurovisión, televisada por La 1, congregó frente a la pantalla a una media de 4,88 millones de espectadores, lo que supone una cuota del 41,8%.
La noche en la que Suiza se alzó con el premio gracias a la defensa de la diversidad de género de su representante Nemo, España tuvo que conformarse con el puesto 22 para la actuación de Nebulossa y su canción 'La zorra'.
Pese a la mejoría en audiencia televisiva con respecto al año pasado, cuando Blanca Paloma representó a España, las cifras no superan los registros alcanzados por Chanel en 2022 (50,8% de audiencia y 6,8 millones de personas siguiendo el certamen). El récord de audiencia de este festival lo sigue manteniendo la final de 2012, año en el que Rosa López mantuvo atentos a su actuación a 12,7 millones de españoles, el 80,4% de la audiencia de aquella noche.
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