La agenda de Elena Sánchez ha estado últimamente cargada de acontecimientos importantes. El pasado 27 de septiembre, era designada como presidenta interina de Radiotelevisión Española. Una semana después, el Consejo de Ministros le concedía poderes ejecutivos y un sueldo que podría ser superior a los 200.000 euros anuales.
La cosa no acaba ahí. El día 13 de octubre, estrenó un programa de entrevistas en el que ejerce de presentadora, que se emite en el prime time de La 2. Y este miércoles, a las 11.00 horas, está citada en el Congreso -Comisión de Presupuestos- para realizar su primer gran acto como representante institucional de la corporación.
Lo hará con dotes de ‘ordeno y mando’, algo que fue posible gracias a la modificación de los estatutos sociales de RTVE que impulsó Moncloa tras la dimisión de José Manuel Pérez Tornero. Esto implicó la utilización de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) como muleta, dado que el cambio tuvo que ser aprobado por su Consejo, en una sesión telemática que se convocó en tan sólo unas horas.
¿Cuál fue el resultado de este proceso? Que Elena Sánchez lograra el poder ejecutivo en un momento en el que iba a quedar vacante.
Este periódico ha tenido acceso al informe que elaboró en esos días la Dirección de Asesoría Jurídica de la corporación, que está firmado el día 7 de octubre. Es decir, tres días después de que Moncloa consumara sus planes para controlar RTVE.
En el citado documento, se aclara que, tras la dimisión de José Manuel Pérez Tornero, a Elena Sánchez tan sólo le corresponden, por ley, las funciones de convocar las reuniones del Consejo, dirigir los debates, autorizar las actas y ostentar el voto de calidad en las reuniones.
En resumidas cuentas, hasta que Moncloa no tomó el acuerdo del 4 de octubre –que ni siquiera fue por Real Decreto y, por tanto, no se publica en el BOE, sino en el Boletín Oficial del Registro Mercantil-, la labor de Sánchez pasaba por llevar la batuta del Consejo y emitir su voto sobre los puntos del orden del día. Si había empate, debía inclinar la balanza de un lado o del otro. Es decir, sus competencias eran muy escasas.
El informe deja claro algo que adelantó Vozpópuli el 29 de septiembre, y es que la presidenta interina no tenía un gran poder de decisión para rubricar contratos.
La firma de contratos en RTVE
La normativa interna de RTVE establece que los acuerdos con las productoras audiovisuales que superen la cuantía de 2 millones de euros deben ser sometidos a voto en el Consejo de Administración de la corporación.
No ocurre lo mismo con los que tienen un montante de entre 500.000 euros y 2 millones. En ese caso, el presidente de RTVE está capacitado para rubricarlos.
¿Qué prevé el reglamento para los casos en los que este puesto este vacante por enfermedad o por una dimisión? Que “podrían actuar, de forma mancomunada, quienes ocupen la Dirección General Corporativa y la Secretaría General”. Así lo dicta el citado informe de los servicios jurídicos de RTVE.
La decisión tomada por el Consejo de Ministros el pasado 4 de octubre modifica este último punto, en cuanto a que concede a Elena Sánchez la potestad para sellar estos contratos, que ni siquiera deberán pasar por el Consejo de RTVE.
Dudas entre los consejeros
Las fuentes de este órgano consultadas por este periódico atestiguan el caos que se ha vivido durante estas semanas en las reuniones que se han celebrado.
Los consejeros designados por el Partido Popular –y Ramón Colom, nombrado por el PSOE- han manifestado sus dudas sobre las posibles consecuencias que podría tener para ellos el participar en las votaciones del Consejo, toda vez que el Consejo de Ministros tomó hace dos semanas un acuerdo cuya legalidad es discutible (los sindicatos UGT, SI y USO preparan actualmente demandas que sopesan dirigir al Tribunal Supremo y a los juzgados mercantiles).
Por el contrario, entre los aliados de Elena Sánchez se advierte de que cualquier omisión de sus funciones como consejeros –que se les concedió en el Parlamento- podría poner en peligro su posición. Uno de estos informantes apunta a que algún consejero, temeroso, llegó a delegar su voto en la presidenta en las reuniones pasadas, ante sus dudas sobre la ‘situación’ actual que vive RTVE.
Este jueves, los nueve vocales volverán a reunirse para deliberar sobre distintos contratos, que suman varios millones de euros de inversión. Entre ellos, la renovación de algunos formatos de MasterChef, la contratación de Lacoproductora (José Miguel Contreras y Prisa) para la realización de un magacín en La 1; o la ampliación de los acuerdos con las productoras de El Cazador y El Comodín de La 1.
Los consejeros esperan que próximamente se ponga sobre la mesa el segundo informe de los servicios jurídicos de RTVE, que fue encargado tras la presentación del primero -el del 7 de octubre- para que certificara que, tras el golpe de mano de Moncloa, no hay ningún problema para que Elena Sánchez ejerza las funciones de Pérez Tornero, aun sin haber sido elegida presidenta por el Congreso de los Diputados.
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