El valor de Prisa ha caído casi de forma progresiva desde que se desató la 'gran recesión' y pillo al grupo con la casa hipotecada. Es decir, con una deuda de 4.800 millones de euros -septiembre de 2008- que se había incrementado en 1.800 tras lanzar la OPA por el 100% de Sogecable. A partir de ahí, se inició un declive que perjudicó especialmente a los propietarios del grupo. Entre ellos, a los Polanco, que se han anotado pérdidas multimillonarias desde entonces.
La última memoria anual de cuentas de Aherlow Inversiones -es decir, de una de las sociedades que dependen del holding empresarial Timón S.A.- permite cerciorarse de este hecho. Ahí se aprecia que durante el ejercicio 2022, la evolución negativa de las acciones de Prisa en la bolsa provocó un deterioro de 15,2 millones de euros en los descendientes de Polanco y de Pancho Pérez. Este último, quien fuera co-fundador de la editorial Santillana.
“A lo largo del ejercicio 2022 ha continuado la caída de la cotización de Prisa en el mercado bursátil, según lo referido en párrafos anteriores, generándose como consecuencia un deterioro en el ejercicio de 15,2 millones. La cotización al cierre del ejercicio 2022 fue de 0,281 euros por acción”, se detalla en el documento, al que ha tenido acceso Vozpópuli a través de la plataforma Insight View.
Actualmente, el precio de cada título de Prisa es de 40 céntimos, después de la apreciación del 30% que obtuvo la compañía en el parqué madrileño tras hacerse efectiva la última operación de bonos convertibles en acciones. Por tanto, el 7,6% del grupo que declararon los Polanco -Rucandio S.A.- en su última comunicación al supervisor de los mercados (CNMV) ha incrementado su valor.
Aun así, las pérdidas acumuladas durante estos años son cuantiosas. Sin ir más lejos, en 2021 ascendieron a 17,6 millones.
Nueva maniobra de salvamento a Prisa
Según la documentación que obra en poder del Registro Mercantil, estos accionistas suscribieron esta operación financiera, en la que desembolsaron 9,4 millones de euros. Previamente, en marzo de 2022, habían solicitado a “una entidad crediticia” -que es Santander- la ampliación hasta enero 2026 del vencimiento de un préstamo que ya ampliaron en 2019.
Las diferentes operaciones con esta entidad las explican en sus cuentas: “Como consecuencia de la ampliación de capital llevada a cabo por Prisa en el año 2019, la partida (del balance denominada) “deudas con entidades de crédito” se incrementó hasta 43,9 millones de euros".
Aherlow Inversiones consiguió en 2018 un préstamo de 38,6 millones de euros de Santander que tenía que devolver cuatro años después. Finalmente, esta entidad financiera aceptó demorar la fecha de amortización hasta 2026.
Mientras tanto, mantiene como garantía las acciones de Prisa de Rucandio S.A. en Prisa. A 31 de diciembre de 2022, el saldo nominal del citado préstamo ascendía a 47,4 millones euros (46,49 millones en 2021), que se correspondían al capital a deber y a los intereses devengados.
Pérdidas continuadas
Los resultados anuales que ha obtenido esta sociedad de inversión permiten deducir que la evolución de algunas de las apuestas de los Polanco no ha sido positiva. En 2022, declaró pérdidas de 17,1 millones de euros, que se unieron a las de 19,26 de 2021; las de 28,7 de 2020; y las de 1,4 millones de 2019.
Actualmente, Rucandio S.A posee el 7,6% de la dueña de Santillana, El País y la Cadena SER. Este porcentaje ha disminuido de forma progresiva desde 2007, cuando aglutinaba el 63,9% de las acciones y era el principal accionista.
Esa posición la ostenta ahora el grupo de inversión británico Amber Capital (29,56%), comandado por el empresario Joseph Oughourlian, quien también cuenta con una participación significativa en Indra.
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