El sueldo de Juan Luis Cebrián ha sido objeto de polémica durante los últimos años. Especialmente en 2011, cuando se embolsó 13,6 millones de euros pese a que Prisa tuvo que declarar la alerta roja tras perder 451 millones. Pese a la complicada situación económica que todavía vive el grupo, su Consejo de Administración aprobó el pasado viernes un "plan de incentivos extraordinario" que premiará a su presidente con 1.600.000 acciones –a 1,2 euros la unidad- y que está ligado a “la recapitalización y estabilización financiera de la sociedad”.
Esta medida será sometida a votación en la Junta General de Accionistas que se celebrará el próximo 15 de noviembre, en la que los socios deberán pronunciarse sobre un premio que no podrá cobrar ningún otro directivo y que está supeditado al éxito de dos operaciones: por un lado, a la venta de Media Capital –filial portuguesa del grupo-, que depende del veredicto del regulador del país luso. Por otro, al éxito de la ampliación de capital de 450 millones de euros en la que trabaja la compañía.
Prisa ha reconocido este lunes en un hecho relevante que esta última operación cuenta con el apoyo del 48,4% de sus accionistas –que tienen derecho de suscripción preferente- y que ya ha recibido ofertas de varias entidades financieras para asegurar el 51,6% restante, que equivale a 232 millones de euros. Pese a la previsión optimista del grupo, su acción ha caído en bolsa por encima del 8%.
En el caso de que dicha ampliación de capital llegue a buen puerto, Cebrián recibirá el equivalente a 1,92 millones de euros en participaciones de Prisa. Su Consejo de Administración considera que la asignación de este bonus a su presidente ejecutivo es necesaria para “incentivar y premiar el desempeño del partícipe en la configuración, preparación, negociación y ejecución del plan de recapitalización de la sociedad”, algo que, a juicio de sus miembros, “constituye un hito fundamental para el futuro" de la dueña de El País, la Cadena SER y la editorial Santillana.
La sucesión de Cebrián
El relevo de Cebrián se producirá una vez se hayan ejecutado los aumentos de capital y la reestructuración de la deuda, algo que está previsto que suceda el próximo noviembre. Ahora bien, de momento no hay ningún aspirante para tomar el testigo, después de que Javier Monzón –expresidente de Indra- retirara su candidatura el pasado viernes, tras una tensa reunión del Comité de Nombramientos y Retribuciones de la compañía.
En el momento en que finalice la relación contractual entre Cebrián y el Grupo Prisa, el periodista y académico recibirá un complemento de jubilación de 6 millones de euros que premiará sus 40 años de dedicación a la empresa y que no será compatible con ninguna otra indemnización, según la información que ha transmitido Prisa a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
A este montante –y a los 1,92 millones de euros en acciones- hay que sumar su retribución anual, que comprende un sueldo de 1 millón de euros, un variable a corto plazo que puede ascender al 40% de esa cantidad y otro a largo plazo que se corresponde con el 20% de su salario.
Por contrato, a Cebrián también le corresponde un “incentivo plurianual variable (2016-2018)” que incluye el pago de “un bruto, en especie y no consolidable” de un máximo de 100.000 acciones, a un precio de 15 euros la unidad. Cabe recordar que su cotización en el mercado es actualmente de 3,16 euros.
Además de estos conceptos, el acuerdo de Cebrián con Prisa incluye una cláusula que obliga a la compañía a sufragar hasta 50.000 euros de gastos de alquiler de una vivienda, dentro de la Comunidad de Madrid.
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