El coste de las retribuciones de los empleados de Radiotelevisión Española será en 2023 de 474,1 millones de euros, frente a los 461,5 que se estimaron para 2022. Esta partida de gasto equivale al 39,5% del presupuesto del que dispondrá el próximo año, que será de 1.194 millones.
Esta inversión ha aumentado de forma progresiva durante los últimos años, incluso pese a que se han aplicado políticas para tratar de contener su incremento, como el plan de ahorro que ideó el Ejecutivo de Mariano Rajoy después del nombramiento de Leopoldo González-Echenique como presidente de RTVE.
Hay que tener en cuenta que a los empleados de la corporación les corresponde un incremento salarial del 3,5% en 2022 y del 6,3% en los dos siguientes ejercicios, en función del acuerdo para el mantenimiento del poder adquisitivo de los empleados públicos. Esto provocará que el gasto en este concepto aumente, pese al programa de bajas que está vigente para los más veteranos de la empresa.
Prejubilaciones en RTVE
Cabe recordar que actualmente hay un plan de prejubilaciones voluntarias, a los 63 años, y jubilaciones forzosas, a los 65, dentro de la corporación. Este programa se recoge en el III Convenio Colectivo de RTVE –aprobado en 2020- y perseguía un rejuvenecimiento de su plantilla y el aligeramiento de la masa salarial. Su aprobación fue anterior a de la Ley de Pensiones, que incentiva el alargamiento de las carreras profesionales.
En el momento en el que se anunció el citado plan de bajas, se incidió en que iría acompañado de la celebración de procesos de oposición para compensar las alrededor de 360 salidas anuales que se han generado a partir de ese año. Sin embargo, todavía no se ha celebrado ningún examen, por lo que se estima que hay más de un millar de vacantes sin cubrir (casi 800 destinadas a los opositores).
En su comparecencia en la Comisión de Presupuestos del Congreso de los Diputados del pasado jueves, la presidenta interina de RTVE, Elena Sánchez, aseguró que en 2023 se cubrirán 1.082 plazas de estabilización de empleo temporal y de nuevo ingreso, a través de distintos procesos de convocatorias públicas.
La plantilla media que tendrá la radio-televisión pública será, en 2022, de 6.550 personas, de las que no podrá disponer de un contrato temporal más del 10%. Así lo determina el Acuerdo de los Peñascales, al que llegaron la empresa, el Gobierno y los sindicatos en el momento en el que se puso en marcha la corporación, el 12 de julio de 2006.
Sindicatos como USO han denunciado que la temporalidad de RTVE es actualmente bastante más elevada, dado que se han producido más de 1.000 salidas en los últimos ejercicios que no han sido compensadas con ‘contratos fijos’, al no haberse celebrado las oposiciones anunciadas.
Incertidumbre presupuestaria
Por otra parte, Elena Sánchez reconoció ante los diputados la incertidumbre que existirá en los próximos meses con motivo de la aplicación de la nueva Ley Audiovisual, que exonera a las compañías de telecomunicaciones de financiar RTVE con una parte de sus ingresos, pero, a la vez, obligará a los nuevos actores del sector –Netflix, HBO, etc.- a realizar una aportación.
Dentro del Consejo de Administración de RTVE se advirtió hace unos meses –en una reunión- del agujero de 100 millones de euros que podría generar esta modificación. Sin embargo, eso no se ha reflejado en el Presupuesto para 2022, que rozará el techo de 1.200 millones que impone la ley que rige el funcionamiento de este servicio público (‘Ley RTVE’).
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