Radiotelevisión Española volverá a vivir un año de vacas flacas. Los Presupuestos Generales del Estado incluyen una partida de 342,87 millones de euros para este medio de comunicación, que es exactamente igual a la del pasado ejercicio, pero muy inferior a la de 582 millones que recibió en 2010, antes de que la crisis económica obligara a recortar drásticamente el gasto público. Eso obligará a sus gestores a configurar la parrilla de programación de sus canales con poco margen de maniobra, ante la falta de voluntad política para aminorar la partida más elevada en las cuentas de RTVE: la de personal (380 millones).
El presupuesto total con el que contará la corporación para 2017 será de 972,8 millones de euros, muy inferior al de homólogas europeas como la BBC (6.300 millones) británica, la ARD alemana (7.000 millones) o la RAI italiana (2.500 millones). También está por debajo del techo de gasto anual que se determinó en su Ley de Financiación, que está fijado en 1.200 millones de euros y al que no se ha llegado durante los últimos ejercicios.
En concreto, en 2012 el presupuesto total fue de 937,21 millones de euros; en 2013, de 941; en 2014, de 940; en 2015, de 948,7; y en 2016, de 974.
Del total presupuestado, un total de 380 millones de euros proceden de la recaudación que obtiene el Estado a través de la tasa radioeléctrica. Por su parte, los gestores de RTVE prevén obtener 44,90 millones de euros de las “ventas comerciales”, una partida que incluye la recaudación por patrocinios.
Ingresos de sus competidores
Según explican fuentes del Consejo de Administración de la corporación, los ingresos de las operadoras de telecomunicaciones y de las televisiones privadas se espera que suban sensiblemente durante este ejercicio, a tenor del buen rumbo de sus negocios. Durante el pasado ejercicio, la corporación recibió un total de 189,9 millones de euros por esta vía, frente a los 380 millones que ingresó en 2010, el primer ejercicio en el que no emitió publicidad en sus canales.
De esta cantidad, un total de 123 millones procedieron de las telecos, 50,2 de las televisiones de la TDT y 16,4 millones de las plataformas de pago (Movistar Plus, Orange y Vodafone, principalmente), según datos del presidente de la corporación, José Antonio Sánchez.
Al igual que durante los dos ejercicios anteriores, Radiotelevisión Española no tendrá que afrontar el pago del IVA sobre sus actividades, lo que ha supuesto un ahorro de más de 70 millones de euros anuales. Este factor ha sido decisivo para que la corporación haya cerrado 2016 con un superávit de 800.000 euros.
Los gestores de RTVE han reservado para este ejercicio una partida de alrededor de 60 millones de euros (+6,55%) para realizar inversiones. Esto “permitirá a la corporación consolidar el proceso de digitalización de contenidos; ampliar las prestaciones de los servicios interactivos adecuándose a los nuevos hábitos de consumo; incrementar la producción propia con la renovación de estudios y equipamientos, así como la construcción de dos nuevos platós en Prado del Rey; continuar el proceso de unificación de los Centros Territoriales, y de actualización del equipamiento técnico de producción y emisión”, según precisó el pasado julio.