Son dos casos casi idénticos, aunque separados por unos cuantos kilómetros y algún que otro matiz. Las plantillas de TV3 y Canal Sur han conseguido evitar, al menos por el momento, las reducciones de sueldo que pretendían imponer los directivos de ambos entes públicos. El esquema es similar: los partidos gobernantes en Cataluña y Andalucía pretendían acometer recortes pero ahora no saben cómo solucionar el entuerto. Así las cosas, es una incógnita el futuro laboral de los 2.500 empleados de la Corporación Catalana de Medios Audiovisuales (CCMA) y de los 1.500 de Radiotelevisión de Andalucía (RTVA). Pasan los meses, no hay acuerdo y la batalla se recrudece en los dos casos.
En el caso catalán, las fuentes de la CCMA consultadas por Vozpópuli señalan que la clave política es más importante de lo que parece. En román paladino, CiU no se atreve a recortar porque no quiere dar más argumentos a ERC, que ya cuenta con mayores simpatías entre los empleados de la corporación. Y ello obedece a que el partido liderado por Oriol Junqueras se ha opuesto frontalmente a las medidas de austeridad que querían imponer el presidente del ente, Brauli Duart, y el resto de directivos, más cercanos a la formación de Artur Mas. El temor de los convergentes a desgastarse con este asunto es tal que se dispara la tesis de que puede haber cambios al frente de la CCMA, algo que sería una suerte de reconciliación con los empleados.
La dirección de la corporación está más que desautorizada tras renunciar a la externalización de la publicidad y después de congelar momentáneamente los recortes hasta el 30 de mayo. Duart y compañía pierden crédito día a día. Y, merced a las protestas de la plantilla, su capacidad de movimiento se ha limitado tanto que ahora proponen alargar hasta el 30 de noviembre las negociaciones para sacar adelante el convenio colectivo que suspendieron semanas atrás como medida de presión. Así, la reducción salarial del 5% que parecía decidida ya a principios de 2014 parece evaporarse definitivamente.
CCOO de RTVA considera que "la plantilla no debe soportar un nuevo recorte, que no obedece a ningún imperativo legal sino a la mala gestión de Joaquín Durán y todo su equipo"
En el caso andaluz el plazo para aprobar un nuevo convenio colectivo es más corto. Sindicatos y dirección decidieron que la fecha tope para llegar a un acuerdo es el próximo mes de septiembre. En los últimos días el pacto parecía cerrado. La mayoría de sindicatos y los directivos habían acordado una rebaja salarial en torno al 6% (sería por tramos, con diferente recorte para las diversas áreas del ente). Pero finalmente Comisiones Obreras se negó a suscribir el documento. Para el sindicato, "la plantilla no debe soportar un nuevo recorte, que no obedece a ningún imperativo legal sino a la mala gestión de Joaquín Durán -director del ente- y todo su equipo", según un comunicado hecho público estos días.
Comisiones Obreras es el sindicato más fuerte en RTVA. De ahí que su convocatoria de una huelga de cuatro horas del pasado día 23 de mayo -copiando el modelo catalán-, justo en el cierre de la campaña electoral, resultase un éxito, pese a la oposición de otras organizaciones sindicales. Y es que en Canal Sur las aguas bajan turbulentas desde hace meses. Más, si cabe, tras conocerse que la Junta de Andalucía aprobó un decretazo para mantener los elevados sueldos de los directivos.
Ante tamaño escándalo, PSOE e IU acordaron a principios de mayo que se acometa una reducción de un 6% en los salarios de los altos cargos. Medida que le parece insuficiente a la gran mayoría de la plantilla. Y es que, en total, los 35 directivos de la corporación pública reciben más de dos millones de euros al año. La formación dirigida por Susana Díaz no quiere ser la mala de la película y, pese a sus promesas, solo acometerá recortes si llega a acuerdos, como el mencionado, con IU.
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