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Somoano remodela su equipo en los informativos de TVE en plena tormenta interna

La cadena pública anuncia varios cambios importantes en los Telediarios. El Consejo de Informativos acaba de censurar la contratación de seis periodistas. La dirección, por el contrario, muestra su total respaldo a las contrataciones. Y González-Echenique, contra las cuerdas por las nefastas pérdidas, ironiza sobre el caso. Además, las relaciones entre los sindicatos UGT y CCOO empeoran a marchas forzadas...  

Son días convulsos en Radiotelevisión Española (RTVE). El malestar en la plantilla es creciente. A quienes trabajan en la cadena pública no les ha gustado nada que trascendiera que se iba a fichar a seis periodistas para trabajar en los Informativos que dirige Julio Somoano. El Consejo de Informativos censuró esta opción y recabó más de 400 firmas de empleados contra las contrataciones. El presidente de la Corporación, Leopoldo González-Echenique, apoyó las incorporaciones e ironizó sobre las supuestas manipulaciones que podrían acometer esos fichajes. En medio de estas peleas internas que parecen no tener fin, el director de los Telediarios ha remodelado a su equipo con varios nombramientos conocidos este lunes. Por otro lado, las relaciones entre Comisiones Obreras y UGT, los dos principales sindicatos en el ente, se han deteriorado hasta límites insospechados. Y las pérdidas, 113 millones de euros en 2013, terminan por conformar una suerte de tormenta perfecta en el ente

La remodelación decidida por Somoano consiste en varias sustituciones en puestos de mando. Desde este mismo martes, Mavi Doñate pasa a ser la responsable de Sociedad en los Telediarios en sustitución de Cristina Alcaine, que ahora es la nueva directora de Coordinación de Informativos de RTVE Canarias. Quien ocupaba ese puesto en las Islas era Ignacio Suárez Braña, que ahora llega como encargado de la sección de Madrid en los Informativos en sustitución de Raúl Díaz Jubete. Todos ellos cuentan con la confianza de Somoano, cuya mano derecha es José Gilgado, director de Contenidos de los Informativos. Con independencia de estos cambios, ambos periodistas, procedentes de Telemadrid, están desde hace tiempo en el centro de las críticas emitidas por algunos sindicatos y, sobre todo, por el Consejo de Informativos, órgano interno con un poder más que simbólico en la Corporación.  

Enésimo incendio

De hecho, estos días se está viviendo en el seno de TVE el enésimo incendio interno a cuenta, precisamente, de una decisión de Somoano y Gilgado, a quienes se acusa constantemente de manipular los Telediarios. Como se ha dicho, el posible fichaje de seis periodistas, ya narrado en este diario, ha desencadenado una batalla que tardará en cicatrizar. El Consejo de Informativos emitió un comunicado, recogido por muchos medios, en que decía que esta incorporación podía ser "un paso más hacia la creación de una 'redacción paralela', siguiendo la pauta de otras malogradas televisiones públicas, como Canal Nou y Telemadrid". Motivo por el que exigieron "la suspensión de cualquier trámite para la contratación de personas externas para desempeñar funciones especialmente sensibles que pueden realizar periodistas de TVE con preparación y experiencia demostrada".   

Echenique habló en el Congreso y la dirección del ente envió un comunicado a la plantilla para contraatacar al Consejo de Informativos

El contraataque de la dirección llegó repartido en dos frentes. Por un lado, el presidente de la Corporación se refirió a este asunto durante su comparecencia parlamentaria del pasado viernes. En concreto, Echenique, por otra parte asediado por las nefastas cuentas del ente, rechazó de plano que estos periodistas lleguen para "manipular" los Telediarios. "Si siete periodistas son capaces de provocar una manipulación, serían siete titanes", sostuvo. Con bastante sorna, afirmó en el Congreso que "dos mil personas hacen los informativos en España y, si son capaces de eso (de manipular), sería algo para reflejar en los libros de historia del periodismo mundial". Además, la dirección de RTVE emitió una comunicación interna como respuesta a sus propios empleados.

Comunicación interna

En dicho texto, la dirección de Recursos Humanos decía que "la Corporación RTVE cuenta con una plantilla muy cualificada que ha sido y es la garantía de calidad y profesionalidad que a lo largo de los años ha definido nuestra actividad como servicio público". "Además, para atender a necesidades puntuales, se nutre de profesionales que son contratados mediante contratos temporales". Recordaba que desde julio de 2012 los Servicios Informativos "han perdido sesenta efectivos" y "solo se han sustituido treinta de estas posiciones". Hacía hincapié en que "la mayor parte de las personas que está previsto se incorporen a la Corporación se encuentran registradas en el banco de datos, y por lo tanto ya han trabajado en la Corporación con valoración excelente por parte de los responsables a los que estaban adscritas". Y decía, por último, que "en todo caso, los contratos que está previsto realizar cumplen todos los requisitos legales para su incorporación".

UGT acusa a CCOO de "mentir sistemáticamente utilizando todo tipo de argucias", de "no tener ningún escrúpulo" para hacerlo y de "jugar con los muertos del 11-M"

Y, por si estas cuitas fueran pocas, este lunes el sindicato UGT envió a los medios una comunicación durísima contra CCOO. El texto, con el revelador título "Absoluta ruptura sindical", acusa a CCOO de mentir a los empleados. "La actual dirección estatal de CCOO en la CRTVE miente sistemáticamente a la plantilla utilizando todo tipo de argucias, y UGT lo lleva denunciando sistemáticamente desde su elección. No tienen ningún escrúpulo a la hora de mentir, y han llegado incluso a jugar con los muertos del 11-M en uno de sus correos masivos en su línea de arañar votos a cualquier precio". Además, en UGT sostienen que CCOO se alió ladinamente con el Sindicato Independiente (SI) para intentar hacerse con el control del Comité Intercentros. En suma, guerra abierta entre los sindicatos de la Corporación.

Una Corporación que, no puede olvidarse, ha perdido 225 millones de euros en los dos últimos años. Y, más allá de los problemas laborales o ideológicos expuestos, esas pérdidas económicas ponen contra las cuerdas a Echenique, cada vez más cuestionado incluso por los miembros del Gobierno que le colocó en su puesto. 

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