Vivendi ha anunciado este martes que ha notificado a la Comisión Europea su proyecto para comprar el grupo Lagardère, una operación que para que sea aceptada por las autoridades de la competencia va acompañada del compromiso de la cesión total de su editorial Editis.
En un comunicado, Vivendi ha explicado que la notificación a Bruselas, que debe controlar si esa concentración amenaza las reglas de la competencia en el sector de la comunicación, se ha formalizado una vez que ha completado el dosier para hacerse con el control de Lagardère. Sobre todo, ha señalado que continúa estudiando sus planes de venta integral de Editis (que Vivendi compró en 2019 al español Planeta), que se haría principalmente con la distribución de títulos a sus accionistas, de forma que la editorial pasaría a cotizar en la Bolsa de París. El grupo Bolloré, accionista de referencia de Vivendi (con casi un 30%) cedería la totalidad de su participación en Editis para dotar a la editorial de "un núcleo de accionistas de referencia y estable". Separarse de Editis aparecía desde el principio como una de las condiciones para que fuera aceptada la absorción de Lagardère por Vivendi, ya que el primero es propietario del otro gran grupo editorial en Francia, Hachette.
El presidente del directorio de Vivendi, Arnaud de Puyfontaine, ha afirmado: "La notificación de nuestro proyecto de adquisición del grupo Lagardère ante la Comisión Europea marca una etapa importante en nuestro objetivo de crear un actor mundial de la edición. Al mismo tiempo, queremos garantizar la continuidad y la integridad de Editis sin trastocar los equilibrios de competencia del mercado francés de la edición".
