Y al día siguiente del gran cambio, llegan las dudas sobre el futuro. Una vez que Rodrigo Echenique ha sustituido a Enrique de Ybarra al frente de Vocento, soplan otros vientos en el conglomerado mediático que edita una quincena de periódicos, entre ellos ABC y El Correo. A partir de ahora, toman las riendas del consejo de administración las familias Urrutia y Bergareche, así como el incombustible Jaime Castellanos. Ese grupo de consejeros que se ha dado en llamar rebelde discrepa de algunas de las líneas que marcaban los Ybarra y el consejero delegado, Luis Enríquez. Este último se encargó de destacar ayer, en la junta de accionistas, el carácter estratégico que tiene en el grupo el diario monárquico por antonomasia. Diario que podría aliarse con otro periódico a medio plazo.
Y es que, además de más que probables cambios de puestos merced a las vendettas pendientes, la llegada de Echenique y el control de los hasta ahora díscolos abre las vías a posibles fusiones de ABC con otro diario de centro-derecha, sea La Razón o sea El Mundo, según remarcan fuentes del sector. No es que los nuevos mandamases de Vocento vayan a vender ABC, sino que son más proclives a posibles alianzas del periódico con alguno de sus competidores. "No hay espacio para tres periódicos nacionales de la derecha", aseguran las citadas fuentes. Un mensaje que casa a la perfección, curiosamente, con lo que suele decir tanto en público como en privado el presidente ejecutivo de Unidad Editorial, Antonio Fernández-Galiano.
Hablar de que dos de los tres diarios de centro derecha se unan es una costumbre en el sector de los medios, pero ahora se dan condiciones más propicias a esa posibilidad
De hecho, hablar de que dos de los tres rotativos de centro derecha se unan en un solo proyecto es ya casi una costumbre en el sector. Por tanto, todo puede deberse a filtraciones interesadas, como ha ocurrido en numerosas ocasiones en los últimos años. Ocurre, sin embargo, que ahora mismo se dan las condiciones más propicias para abonar esta posibilidad. A la reciente llegada de Castellanos y compañía al timón de mando en Vocento hay que sumar, obviamente, el relevo en El Mundo que se produjo a finales de enero. Como ya ha publicado Vozpópuli, el gran escollo para cualquier fusión era siempre el exdirector Pedro J. Ramírez.
También abonan las opciones de fusión los datos contantes y sonantes sobre los tres diarios mencionados. Las malísimas cifras del número de lectores de todos los periódicos nacionlaes, que pierden difusión cada mes de forma irremediable, y la importante merma en los ingresos publicitarios de los mismos apuntan a la necesidad de que dos de ellos se alíen. Y ha habido operaciones al respecto sobre la mesa, como la posible compra de Unidad Editorial por parte de Planeta. Las posibilidades son muchas y las especulaciones al respecto crecen, si cabe, en las últimas horas. En todo caso, en este embrollo tienen mucho que decir los nuevos mandamases de Vocento, ese grupo siempre convulso.
¿Consenso?
Las convulsiones contiúan en Vocento. En su adiós, Enrique de Ybarra se afanó en mostrar una imagen de unidad y consenso. "Como anuncié, mi presidencia tenía un carácter de transición", remarcó. "En estos dos años -agregó- se han cumplido los objetivos que me fijé: mi misión ha sido lograr un reencuentro y conseguir que todos remáramos desde el primer día en la misma dirección". "El funcionamiento del consejo de administración ha mejorado notablemente en este tiempo", dijo, en lo que pareció una defensa, aunque tímida, de su propia gestión. Y luego llegó el anuncio adelantado por este diario: "Creo que ha llegado el momento de ceder mi posición al frente del consejo de administración".
Ybarra, el hombre que consiguió un consenso que parecía imposible en el grupo, asegura en su adiós que su sustituto "es el mejor presidente que podría tener Vocento para esta nueva etapa"
No había dudas sobre el sustituto: "Hoy he propuesto al consejo el nombramiento como nuevo presidente de Rodrigo Echenique y estoy convencido que es el mejor presidente que podría tener Vocento para esta nueva etapa", sostuvo. Y remachó que su propuesta de nombrar a su sustitutio "ha sido aprobada por unanimidad con efectos a la terminación de esta junta". Al término de su intervención, los accionistas presidentes tributaron un sonoro aplauso al presidente saliente. De hecho, es cierto que él ha encarnado durante dos años un consenso que parecía imposible en el grupo de capital vasco. Aunque ha tenido un perfil institucional y se ha dedicado menos a las peleas familiares.
No obstante, a pesar de los intentos de Ybarra por mostrar unión entre los consejeros, es vox populi que continúan las cuitas entre familias en el seno del consejo de administración. De hecho, este relevo en la presidencia es fruto del cambio de bando de Soledad Luca de Tena, según remarcan desde hace días fuentes del propio grupo que se salen así del discurso oficial. Las dudas estriban ahora en saber, como se ha dicho, qué planes pondrán en marcha en el futuro más inmediato.
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