El pasado de Angelina Jolie ha reaparecido estos días por obra y gracia de la galería londinense Zebra One, que está a punto de sacar a subasta una colección de fotografías de la actriz tomadas en los años 90. En las imágenes, realizadas en blanco y negro, Angelina aparece desnuda y casi sin maquillaje, a excepción de los labios.
Las fotografías capturan la esencia de la belleza juvenil de una Angelina cortada por los cánones de la época: lánguida, delgada y con cierto aire goth. En una de las imágenes, la protagonista de Malefica aparece sentada en el suelo con la mirada perdida, las rodillas tapando su pecho y los tobillos atados con un lazo mientras con sus manos agarra los pies. Otra de las instantáneas es un primer plano de su rostro en el que mira incisivamente a cámara.
Las imágenes forman parte de una sesión fotográfica realizada por la artista Kate Garner en 1995 a la actriz, que entonces contaba con 20 años y participaba en sus primeros trabajos cinematográficos, como Hackers, en la que conocería a su primer marido, Jonny Lee Miller. A partir de entonces comenzó una ascensión meteórica que ha acabado convirtiéndola en una de las intérpretes más consolidadas -aunque también de las más odiadas- de Hollywood. Hoy, quien quiera hacerse con estos recuerdos de sus años de juventud, tendrá que reservar al menos 2.500 libras (unos 3.400 euros) para participar en la subasta que se celebrará en Londres en los próximos meses.
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