A sus 33 años, Busta nos ha contado que “no ha sido fácil porque tuve que charlar con la periodista que ha ido construyendo mi historia en momentos entre conciertos y viajes. En huecos que tenía en la gira y demás. Y de estas conversaciones salen mil historias que cuentas cuando estás entre amigos pero nunca antes para el público o para los medios de comunicación”.
“El libro esconde por qué soy como soy desde que nací hasta el día de hoy”, ha recalcado. Tampoco han faltado las bromas: “Espero una segunda parte, pero espero que sea antes de los próximos 33 años, porque a los 66 no me veo, aunque puede que haga como Julio Iglesias, quien ha dicho que cantará hasta los 90”.
Analizamos los diferentes puntos fuertes de la rueda de prensa.
Sobre su carrera y vida
El cantante ha recordado sus inicios en el panorama musical español. “Lógicamente cuando me conocisteis tenía 19 años, ahora tengo unos cuantos más y es lógico volverse más pausado y tranquilo. Pero sigo siendo entregado, emotivo y soñador. Quizá la vida te va curtiendo”, ha reflexionado.
El momento más especial en su vida persona, fue “el día en que nació mi hija”, y anécdotas divertidas tampoco han faltado. Concretamente aquella que ocurrió en su despedida de soltero. “Era la primera copa que me iba a poner y los vasos de sidra son muy finos, me seccioné un tendón de un pie y me tuvieron que operar de urgencia. Como no quería dejar escapar a ese pivón (Paula Echevarría) pues fui a casarme con una férula y un bastón”.
Sobre su público
El cantante ha disociado entre el público de calle y el público Online. “En las redes sociales todo el mundo se atreve a descalificar, pero en persona jamás. Por la calle me cogen las abuelas, no te dejan moverte, te pellizcan la mejilla o te llevan con los nietos en sus carteras”. “Voy parando cada 100 metros y me va pasando de todo, y es divertido”.
Sobre su hija
Se le cae la baba, sin embargo, cuando habla de su hija. “Es super aplicada, le encanta leer, escribir y dibujar. Es muy buena estudiante, cosa que no era el padre. Tengo mucha ilusión con dejarle mi libro en sus manos y que lo lea. Como es un libro emotivo seguro que lo dejará, lo retomará y le emocionará”. “¿Lo peor de mi hija? Que es mujer”. “Le gusta mucho parecerse a su madre pero es igual que yo tanto físicamente como de forma de ser, es un calco a su padre”. “Mi hija y Paula es mi casa, mi hogar, son mis chicas, mi vida”.
Sobre su infancia
“Me gustan las fotografías de cuando era pequeño, me emociona ver a mi hija en ellas y recordar que he tenido una infancia maravillosa. He sido de esas personas privilegiadas que se ha criado en un pueblo, que ha ido a comprar el pan o que recibía los gritos de su madre de un vecino a otro cuando no existían teléfonos móviles. Esas cosas hoy en día son impensables y he tenido una infancia super feliz. Éramos tres garrulos (mis hermanos y yo) y mi madre no ha tenido la oportunidad de peinar una trenza hasta que naciera mi hija”, ha recordado.
Sobre Operación Triunfo
“Sin esa época no estaría aquí. Cada uno tiene que tener su opinión y su experiencia, pero a mí me dio la oportunidad de darme a conocer en 5 meses y medio. El resto de años han sido fruto de mucho trabajo. Aun así no puedo obviar algo que es el principio de todo, igual que no puedo obviar a mis padres por darme la vida”.
Sobre sus amores anteriores
Este ha sido el momento de mayor tensión para los asistentes a la rueda. Y es que Busta se pone nervioso cuando le preguntan por amores del pasado. “Estoy casado y no es plan de recordar a mis novias anteriores. He tenido dos o tres novias pero la primera mujer de mi vida es Paula, ¿para qué voy a tener movidas en casa?”. "No hablo de mis novias pasadas, ¿vale?", dijo para zanjar este tema.
También ha esquivado su historia pasada con Gisela, miembro también de la famosa academia de TVE, recurriendo a algunas bromas: “Para que lo sepáis, mi verdadera historia fue con Manu Tenorio. Esos ojos me volvían loco”.
Sobre las próximas elecciones
El artista se ha mojado, incluso, a hablar de las elecciones que se avecinan el próximo mes de diciembre: “Los cambios políticos me pareces muy positivos porque salen nuevas opciones a la palestra. Estoy enfadado, como todos, porque se han hecho las cosas muy mal, la corrupción que pasa de puntillas y no se castiga, las cosas que nos venden pero que no se hacen, los desahucios, la pobreza, la precariedad de los sueldos… Soy apolítico pero espero que llegue una persona que no esté viciada en el poder, una persona nueva y joven. Que luego no presuma de sueldos vitalicios, y que no exijan a las personas que son las que levantan el país mientras ellos son los que hacen las mil trampas. Hay que limpiar la casa desde dentro para que el discurso fuera vuelva a ser el de ‘cómo mola España’ y no el que hay ahora, que me da vergüenza”.
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